A los tortolitos los dejaron con las ganas justo cuando estaban a punto de gritar Viva Chile en el encierro.
Una particular situación se produjo la noche de este miércoles en Gran Hermano, la cual estuvo protagonizada por Sebastián Ramírez y Constanza Capelli.
Así nomás, pues luego de cumplir con el desafío de besar a tres de sus compañeros, el galán tuvo la oportunidad de tener un momento a solas con su “pareja” en el encierro.
Por lo mismo, los tortolitos tuvieron una romántica cena, en la cual abordaron diversos temas. Incluso, Constanza le dijo en su momento que luego de unos conflictos que tuvieron entre ellos, pensaba que lo mejor era finalizar el romance.
“Bueno, yo creo que deberíamos seguir manteniendo la buena onda, la amistad. Creo que fue mucho y yo ya no te veo de la misma manera”, le dijo la bailarina en medio de la charla.
De todas formas, nada de eso impidió que la conversación el rato empezara a subir de tono, tanto así que quisieron tener una noche de pasión.
Quedaron con las ganas
Sin embargo, Gran Hermano los frenó en seco, pues justo cuando estaban en la cama, apunto de iniciar el dele que suene, alzó la voz y los dejó con las tremendas ganas.
“Han bebido alcohol y en consecuencia no pueden tener sexo. La cena ha finalizado, deben regresar”, les dijo la voz del programa.
“Nos cacharon muy califas y nos mandaron de vuelta”, alegó Sebastián tras ver frustradas sus intenciones de gritar Viva Chile.
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