“Es una droga tan poderosa… nunca pude serle fiel a nadie”, fue parte de la confesión del actor, que se asumió como un adicto al sexo y apareció luego de casi tres años desde que emergieran las primeras denuncias en su contra.
El primer domingo de enero de 2018, el actor estadounidense James Franco, reconocido por su interpretación en películas como Spiderman o 127 hours, llegó hasta la ceremonia de los Globos de Oro luciendo un pin de Time’s up, el movimiento contra el acoso sexual que nació unos días antes entre celebridades de Hollywood en respuesta al efecto Weinstein. Minutos más tarde, apareció el primer tuit en su contra:
“Ey, James Franco, bonito pin del #timesup en los Globos de Oro”, publicó la actriz Sarah Tither-Kaplan. “¿Te acuerdas de hace unas semanas cuando me dijiste que mi desnudo completo en dos de tus películas por 100 dólares al día no era explotación porque firmé un contrato? ¡Se acabó el tiempo de eso!”.
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Franco acababa de obtener el premio a mejor actor de comedia por su actuación en The Disaster Artist, cuando apareció una segunda acusación, incluso más subida de tono.
“Bonito pin #Timesup James Franco. ¿Te acuerdas de la vez que me bajaste la cabeza hacia tu pene desnudo en un coche y la otra que le dijiste a mi amiga que fuera a tu hotel cuando tenía 17 años? ¿Y después, cuando te pescaron haciendo lo mismo con otra chica de la misma edad?”, se sumó la también actriz Violet Paley.
Ally Sheedy también entregó su testimonio en redes sociales: “James Franco acaba de ganar. Por favor nunca me pregunten por qué dejé la industria del cine y la televisión. OK espera. Adiós. Christian Slater y James Franco en una presentación de los Globos de Oro #YoTambién”. Con el tiempo se sumarían más mujeres.
De eso pasaron casi tres años en los que el actor permaneció en estricto silencio. Se supo, eso sí, que tras la denuncia que presentaron en 2019 Tither-Kaplan y Toni Gaal contra el propio Franco y sus socios de Studio 4, la escuela de actuación donde impartía clases de actuación, pagó más de dos millones de dólares para llegar a un acuerdo judicial. Pero ahora, después de tanto tiempo, finalmente se allanó a hablar:
“Admito que me acosté con estudiantes y eso estuvo mal. Nunca debió haber pasado… supongo que en ese momento, mi pensamiento era que si era consensuado, estaba bien… no quería lastimar a nadie”, soltó Franco, en conversación con el podcast The Jess Cagle, de la firma SiriusXM.
Luego, explicó por qué guardó silencio: “En 2018, hubo quejas sobre mí y en ese momento pensé que tenía que quedarme callado. Tenía que hacer una pausa. No parecía el momento adecuado para decir nada. Había gente que estaba molesta conmigo y necesitaba escuchar”.
“Es una droga tan poderosa… nunca pude serle fiel a nadie”, confesó más tarde, reconociendo además que se encuentra en rehabilitación:
“He estado trabajando mucho. Yo estaba recuperándome por abuso de sustancias. Y hubo algunos problemas con los que tuve que lidiar que también estaban relacionados con la adicción. He usado mi experiencia (en adicciones) para cambiar quién era”.
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