"Profesionales de la TV vs. colados"
La TV está en la sobremesa de las familias chilenas. Algunos la odian y otros no, pero nadie lo cuenta, "un placer culpable".
No me gusta que el chileno reniegue de la TV, aunque la encuentre mala, mientras el CNTV dice que vemos tres horas diarias.
Ayer, 70 fueron los profesionales de las comunicaciones que transmitieron el Ironman de Pucón. Grande Gustavo Huerta, Cristián Bustos y grande TVN por el compromiso que está asumiendo con el deporte.
Transmitirá la Copa Davis, el primer partido de Colo Colo - Católica, ahora sí, ¡por ahí te voy creyendo TVN!
Otro tema complicado de la TV chilena es el de los contratos y los cesantes. Por ejemplo, el periodista deportivo goza de otra realidad laboral, el boom de los canales deportivos los benefician. No así los actores, periodistas, conductores, equipos completos de producción. ¿Por qué esta gente no puede tener contratos normales?
Viendo un reportaje fui testigo de "rostros" que dicen: "tengo contrato hasta el 15 de febrero", "mi contrato se acabó el 31 de diciembre", y tantos que definitivamente están sin pega.
No quiero ser injusto, pero que Juan Pablo Queraltó no tenga contrato es raro. Es injusto que Bastián Bodenhofer, Ximena Rivas, Berta Lasala y tantos actores estén suplicando pega en la cuña del programa de espectáculo de turno.
No puedo callarme sobre el tema de los "colados en la tele". Profesionales de otro rubro con contratos millonarios ocupando el puesto de los que sí pertenecen al mundo de la TV.
Que Daniel Stingo se haya ido del matinal es normal, su pega es de abogado, que el Inspector Vallejos ya no tenga pega en la tele también da lo mismo, suena cruel, pero el mundo de la televisión es muy chico para que lleguen los "colados".