Pamela Jiles regresará a la televisión como panelista de "Me Late, las diputadas" y pese a confesarse chocha con su trabajo en la cámara, asegura que aprovechará este espacio para volver a hablar con sus "nietos".
Se hizo un nombre en la pantalla chica y su trabajo periodístico le valió para pelear un escaño en la cámara de diputados. Pamela Jiles ha sabido aprovechar su tribuna en su actual rol político, sin embargo el retorno a ese viejo amor tevito está pronto a consumarse.
"Me Late, las diputadas" es el nombre del espacio que irá cada jueves en TV+ y donde "la abuela" compartirá panel con Marisela Santibáñez y Marcela Sabat, en un espacio que aceptó reconociendo esa vieja añoranza por estar ligada a la TV.
El primer amor de Jiles
"Ser diputada, representar a los 'sinmonea' en el Congreso, me hace muy feliz, y he vivido este año y ocho meses como si el Parlamento fuera un gigantesco escenario, pero también es verdad que extraño el periodismo y la pantalla", reconoció la representante del distrito 12 compuesto por La Florida, La Pintana, Pirque, Puente Alto y San José de Maipo.
El programa ha optado por ser un espacio femenino. ¿Qué le pareció esta decisión? Soy partidaria de promover la mayor participación de las mujeres en política, sean de centro, de derecha o de izquierda, y así como los hombres se concertan para cerrarnos el paso, nosotras podemos unirnos para ganar espacio. Y ver más dirigentas en pantalla genera el deseo en las mujeres más jóvenes de presentarse como candidatas.
¿Qué le parece el panel que integrará? Ambas son mujeres poderosas, inteligentes, de carácter fuerte y convicciones claras. Además son bellas, audaces y tienen sentido del espectáculo. Es decir, !perfectas!
¿Y va con una idea establecida de lo que quiere proponer en el programa? Solo queremos acompañar a la audiencia, conversar de lo que a mis nietos les interesa, llevar el Congreso a las casas, a las oficinas, a las micros, estar cerca de las personas a las que representamos.
Se ha dado que distintos políticos están aprovechando espacios en TV, como Joaquín Lavín o Francisco Vidal. ¿Qué le parece esta tendencia? Hace décadas que sostengo públicamente que la televisión y la política tendrán cada vez más vasos comunicantes. En esta sociedad, la sociedad de espectáculo, los personajes que provenimos de la pantalla, que hemos acompañado al público por décadas, tenemos una credibilidad y una cercanía muy superior a los políticos de la elite clásica y será así cada vez más.
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