“Hay que tener mucho cuidado con él”, advierte el oriundo del Cajón del Maipo sobre el argentino.
“Ha sido una locura, es una casa de locos, literalmente”. Así define Pangal Andrade lo que han sido sus primeros días en el nuevo reality de Canal 13, ¿Ganar o Servir?, que se estrenó este domingo, aunque los participantes ya llevan poco más de tres semanas en el encierro de Perú.
En declaraciones a las que accedió La Cuarta, quien fuera ganador de Año 0 en el 2011, plantea que “hay personalidades muy fuertes adentro, y ahora estando más viejo, tengo menos paciencia y echo mucho de menos mi libertad y mi polola”, en alusión a Melina Noto.
“Aquí empezamos tranquilos, pero ya se desató el caos y hay tensión en todo momento, pero hemos hecho un grupito de amigos”, actualiza sobre su situación.
“Cuando tenía 24 era como un toro, tenía energía, ganas, tenía mis metas y expectativas”, rememora en alusión a primer encierro. En cambio, “ahora tengo menos paciencia, digo las cosas en vez de morderme la lengua, y hay gente que actúa un poco aquí adentro para no quedar mal afuera con la gente, no ser juzgados, y se aguantan, se comen las cosas”, analiza. “Yo, ya no soy así, cuando me molesta algo lo digo, aunque trato de que sea de buena manera para no molestar a la gente”.
Su distancia con Luis Mateucci
Antes de entrar a la casa en Perú, en el desierto, Pangal se encontró con otro favorito, Luis Mateucci, quien fue finalista de Tierra Brava, cayendo ante Fabio Agostini. El oriundo del Cajón del Maipo llegó cargando en sus brazos a Fran Maira, siendo recibido en la pantalla de manera provocadora por el argentino: “Él era el máquina, pero hace veinte años, hay que ver cómo está”, lanzó. “¿Siempre ha sido así?”, le preguntó el chileno a Oriana Marzoli, ex del trasandino. “Insoportable”, confirmó ella, “pero lo acabas queriendo”, agregó.
“Mateucci es un personaje que todavía no puedo leer”, admite Pangal. “Es un profesional de los realities, lleva varios en su vida, él sabe hacer esto”, así que “hay que tener mucho cuidado con él; le pusimos ’Doble cara’ porque lleva y trae, no es una persona fiable, no le puedes contar nada porque te lo puede sacar en cualquier momento; sabe moverse en este ambiente”.
“Pero son principios de cada uno, no hay que meterse ahí, sólo aconsejar cuando corresponde”, cerró.
En sus primeras horas, Pangal también vivió un incómodo momento con Camila Recabarren, quien lo encaró por encontrarlo poco “coherente”, palabras a las que él prefirió hacer oídos sordos.
LEE TAMBIÉN EN LA CUARTA: