El décimo filme de Larraín como director dispondrá de las actuaciones de Jaime Vadell, Gloria Münchmeyer y Alfredo Castro.
Este martes por la mañana el Festival de Venecia confirmó las películas que formarán parte de la competencia en su próxima edición.
Y entre ellas aparece el trabajo más reciente del cineasta nacional Pablo Larraín (No, El club, Neruda), una sátira colmada de elementos históricos que presenta acaso como mayor novedad la historia de Augusto Pinochet imaginado como un vampiro de 250 años que ha decidido morir para siempre, agotado por el desprestigio y los problemas familiares con los que carga.
El conde, como llamó a ésta, su primera producción junto a Netflix, “es una vieja idea que se basa en el más peligroso de todos los potenciales conceptos, que es que una figura como Pinochet pueda ser eterna”, explicó Larraín hace poco a Variety.
“Los vampiros no mueren, no desaparecen, tampoco los crímenes y robos de un dictador que nunca respondió ante la justicia. Junto con mis colaboradores en la película quisimos mostrar la brutal impunidad que representa Pinochet. Mostrándolo de frente por primera vez para que el mundo pueda sentir su verdadera naturaleza: ver su rostro, sentir su olor. Para eso, hemos utilizado el lenguaje de la sátira y la farsa política”, profundizó con Netflix Chile.
El filme, décimo para Larraín como director, contará con las actuaciones estelares de Jaime Vadell —como el vampiro Pinochet— y otras glorias de nuestra actuación, como Gloria Münchmeyer —en la piel de su esposa— o Alfredo Castro.
Consultado por Variety si la película se trata de una alegoría, Larraín sostuvo que “es correcto decir algo como eso en un momento en que parece que la historia necesita repetirse para recordarnos lo peligrosos que somos –nosotros como sistema–. Y no quiero cambiar nada, porque no podemos… pero si lo mostramos, quizá podamos encontrar un lugar donde podamos sentir que tiene sentido”.
Por otro lado, sobre su retorno al Festival de Venecia, el director puntualizó: “Estoy encantado. Un verdadero templo histórico para el cine mundial, con esta película que lleva años de gestación y que por fin ve la luz gracias al inmenso trabajo de cientos de técnicos, artistas y actores chilenos, con el apoyo y confianza de Netflix, una gran partner para el cine contemporáneo”.
El director, como ha ocurrido en otras de sus obras —El club, Neruda— comparte los créditos del guion con Guillermo Calderón. Por otro lado, El conde será producido por Juan de Dios Larraín.
Se espera que vea la luz en el gigante del streaming en algún momento del segundo semestre.
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