Fue una de las caras más queridas de la televisión en los 90. Sin embargo, la vida de Patricio Oñate dio un giro inesperado tras alejarse de la pantalla. Hoy, enfrenta uno de los momentos más duros de su vida.
Si viste televisión durante los años 90 y 2000, seguramente recuerdes a Patricio Oñate, el carismático notero de Canal 13 que recorrió Chile con su “camarita amiga” y acompañó a la Selección Nacional en las clasificatorias al Mundial de Francia 98.
Con su estilo cercano y espontáneo, participó en programas icónicos como Viva el Lunes, Sábado Gigante y el recordado espacio de concursos Si se la puede gana, donde se encargaba de mostrar las historias de las familias que llegaban a concursar.
Llegó a la fama por sus dinámicas notas en televisión, por su carisma y su cercanía con la gente. Se cree que es por ello que se ganó su apodo de “chanta”. Sin embargo, Oñate explica que escuchó el término por primera vez de Diego Maradona mientras lo entrevistaba. Maradona lo llamó “chanta” después de que Oñate insistiera en hacerle más de las tres preguntas estipuladas.
Su vida tras la televisión y regresos esporádicos
El 2003 marcó el final de Si se la puede gana y, con ello, también el fin de su carrera en la televisión abierta. En entrevistas posteriores, Oñate confesó lo difícil que fue afrontar este cambio y los problemas económicos que enfrentó tras dejar de ser un rostro televisivo.
Luego de 12 años de ausencia, en 2015 reapareció en Sin Dios Ni Late, donde recordó sus días siguiendo a la Roja, esta vez en la Copa América bajo el mando de Jorge Sampaoli. Posteriormente, en 2020, tuvo una aparición en el matinal Bienvenidos de Canal 13, donde habló sobre su vida alejada de los medios en Chiloé junto a su esposa e hijos.
Paralelamente, en 2023 dio a conocer que se encontraba vendiendo miel: “Hicimos una pyme familiar y yo ofrecía a través de mi Instagram. Nos iba bien dentro de todo, era una manera de hacer algo juntos como familia”, explicó a LUN.
El golpe más difícil
En 2021, Oñate publicó un video en redes sociales en el que reveló que su esposa, María Cecilia Briceño, había sido diagnosticada con cáncer de estómago en 2013, pero fue el 9 de abril de 2024, que el comunicador confirmó a través de redes sociales la muerte de su esposa.

En una entrevista con LUN, Oñate compartió la experiencia de sus últimos días junto a ella y el impacto que su partida ha tenido en sus hijos, Nicolás y Clemente, de 12 y 8 años.
“Por mucho que hace tiempo ya sabíamos que no se podía hacer nada, que mi señora solo estaba recibiendo un tratamiento paliativo, ha dolido mucho. Demasiado”, confesó el exnotero. “Cuando (sus hijos) entraron a la pieza, ellos solo querían ver a su mamá. No sabían qué decir. Y María Cecilia los miró y les dijo: ‘Pásenlo bien’. Ese fue su mensaje”, relató Oñate.
“Por mis hijos, no puedo tirar la toalla”
En la misma conversación, Oñate expresó el profundo dolor que siente tras la partida de su esposa: “Me siento noqueado, como el boxeador que ya está tirado en la lona, sin reacción. Pero está claro que no tengo derecho a tirar la toalla. Por mis hijos, no puedo tirar la toalla”.

¿Qué fue de Patricio Oñate?
Actualmente, Patricio Oñate sigue viviendo en Castro, Chiloé, donde ha encontrado refugio en sus amigos y en el trabajo comunitario. Pese a su duelo, continúa participando en notas deportivas para la Municipalidad y compartiendo parte de su trabajo en redes sociales.