Influencer no aguantó las lágrimas al exponer la delicada situación con sus seguidores y seguidoras.
Naya Fácil enfrenta un complejo momento personal en la previa de Navidad, el cual está relacionado directamente con su mamá, con quien no se lleva nada bien y perdió el contacto directo hace años.
Así lo ha recalcado una y otra vez la influencer, quien en innumerables ocasiones comentó que pese a las adversidades de la vida, pudo escapar de un ambiente familiar tóxico y salir adelante a su hermana.
De hecho, hace algunas semanas habló largo y tendido sobre ese tema en medio de su visita a Primer Plano.
“Mi infancia fue súper dura. (…) La verdad, yo desde los 5 años soy una chica golpeada por mis padres. Desde los 5 a 6 años que tengo conciencia, con mi hermana teníamos moretones, porque a veces no sabíamos hacer ciertas cosas del campo y ellos nos golpeaban”, relató en aquella oportunidad en el espacio de CHV.
“Me golpearon hasta los 17 años, o 18 años, que fue cuando yo me fui de mi casa. Yo a veces llegaba al colegio con golpes y les decía, ‘no, me caí’. Me tuve que callar muchas cosas. En mi colegio me querían mandar al psicólogo, pero yo por mis propios papás nunca fui creyente en eso. Entonces esos días yo no iba al colegio cuando me tocaba ir al psicólogo”, complementó.
Además, recordó que “había palabras de mi madre que me decía que me intentó abortar a mí, a mi hermana, que ella nunca quiso ser madre. Lo entiendo, pero hay muchas cosas que nos tocan en la vida que nosotros no queremos y que es lo que toca”.
“Yo tengo pésimos recuerdos de mis padres y yo me imaginaba intentar arreglar todo con ellos, pero al final hoy en día siento paz de que no estén”, complementó en el programa conducido por JC Rodríguez.
El desahogo de Naya Fácil
Pero eso no es todo. Ahora, Naya Fácil se quebró al recibir un inesperado gesto de su mamá de cara a Noche Buena. Según reveló en su cuenta de Instagram, la mujer le hizo un depósito como regalo del Viajo Pascuero, cuestión que las dejó con el ánimo por el suelo.
“Mi madre acaba de depositarme dinero por la Navidad, qué pena siento Dios mío, no necesito ese dinero. Por qué nunca me puedes dar un abrazo. No quiero eso (dinero)”, lamentó entre lágrimas.
Y en esa misma línea, subió otra historia donde continuó con su desazón. “Seis años sin hablar y sigues con el mismo pensamiento. Nunca quise plata, solo quería tu cariño”, remató.