El matrimonio y sus hijos reconocieron un delicado momento que enfrentaron en medio de la pandemia.
Varias son las anécdotas y papitas que surgen en cada capítulo de Tenemos que hablar, programa web donde Marcela Vacarezza y Rafa Araneda conversan junto a sus hijos sobre diversas temáticas.
Por ejemplo, el pasado domingo recibieron una pregunta de los seguidores del espacio, la cual los puso a todos contra la pared: “¿Han tenido crisis matrimoniales grandes?”, les consultaron.
Acto seguido, el familión reconoció que en medio del confinamiento por la pandemia hubo periodos en los que todos querían agarrarse de las mechas.
“El papá no estaba y nosotros nos estábamos peleando mucho con la mamá. Entonces el papá se enojaba porque todo era pelea”, comentaron los hijos del matrimonio, dando a entender que no todo fue color de rosas por esos años.
Además, le confesaron a Vacarezza que en un minuto hicieron una reunión telemática con el Rafa, en la que ella no estuvo presente.
“Hicimos un Zoom para declarar nuestras quejas hacia ti y el papá dijo ‘¿Qué quieren? ¿Que me separe?’ Y fue como ‘¡No!”, relató Vicente.
La defensa de Marcela Vacarezza
Acto seguido, la psicóloga tomó la palabra para defenderse de la situación.
“Es feo, porque es como que la causante de todo hubiera sido yo. Estas (sus hijas) me decían ‘a todos mis amigos los dejan salir’. Llegaban y decían ‘hasta cuándo no voy a poder salir’. No sé hasta cuándo, la pandemia lo va a decir”, planteó.
Luego, Florencia también sacó la voz y se dirigó a su madre. “Asume que nos peleábamos todos los días contigo”, le dijo. “Todos nos queríamos divorciar de todos”, comlementó Martina entre risas.
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