Desde que eran compañeras en Mekano, Romina Sáez y Monty mantuvieron una íntima amistad. De hecho, tras el fin del espacio juvenil de Mega, animaron juntas "Bang", programa de Vía X donde presentaban videos de reggaetón.
Sin embargo, toda esa buena onda se fue al tacho de la basura tras el despido de la Romi, quien fue sacada de manera inesperada justo antes de presentar licencia para realizarse una operación.
Por lo mismo, la chiquilla llevó a su ex casa televisiva a la Justicia, donde se enfrentó con Monty, quien testificó en su contra. Por lo mismo, hoy en día no la puede ver ni en pintura.
"Yo consideraba a esta persona una amiga. Pero cuando me muestran la lista de testigos no lo podía creer. Hay un delito, que se llama falso testimonio. Yo no quería que me apoyara, quería que saliera la verdad. Y por algo gané", reveló este martes en "Intrusos".
Además, recordó una conversación que tuvo con Monty tiempo antes de esta situación. "Ella me dijo un dicho que hasta ahora me acuerdo: 'cada uno se debe agarrar con sus propias uñas'. Y después en el juicio lo entendí, pero no es mi manera de vida. No es mi forma de ser", recalcó.
¿Traición?
De hecho, la propia Romina reveló en el programa de espectáculos de La Red que se sintió traicionada. "En medio de la audiencia pensé que me iba a desmayar. Y ahí me encuentro con ella. Yo le tiré una pregunta que habíamos hecho un evento en conjunto y que perdimos los pasajes porque no nos dieron permiso. Y eso marcaba la diferencia altiro con el Juicio y ella lo negó. Dijo que no. Yo traté de mirarla pero nunca me dio la cara", agregó.
Incluso, juró que todo su círculo tiene a Monty entre ceja y ceja por ese cuchillo en la espalda. "Es fuerte lo que voy a decir, pero toda la gente relacionada a mí o de mi familia, me dice 'oye sabes que el otro día vimos a la Judas'. En persona no la volví a ver nunca más. Y si la veo en alguna parte, no hablo más con esa mujer", remató.