En el programa estelar de CHV, la actriz compartió con su colega Soledad Pérez, quien recordó un episodio que protagonizó el fallecido intérprete.
En un nuevo capítulo de La divina comida (CHV), la actriz y actual concejal por San Bernardo, Soledad Pérez, debió ser anfitriona y recibir la visitas del músico Horacio Saavedra, el comediante Ricardo 'Zip-Zup' Rodríguez y la también intérprete Paula Sharim.
Como es costumbre, los comensales llevaron algunos obsequios a la dueña de casa.
Fue así cómo Paula le regaló un cuadró a su colega Soledad de Nadie sabe para quién se enoja, la primera obra de teatro profesional en que participó esta última cuando apenas tenía 18 años.
Fue ahí cuando le surgió el recuerdo de Nissim Sharim, el destacado actor que falleció en noviembre del 2020.
—Yo tengo un lazo con Paula, porque Nissim fue la persona que me trajo al teatro —partió contando—. Él me descubrió en un taller de Andrés Rillón de la Universidad Católica.
Por aquel entonces, Soledad pensaba retirarse de sus cursos teatrales, en vista de que le topaban con sus estudios de enfermería; además, a su padre le preocupaba que su hija estudiara dicha carrera.
Fue ahí cuando la aparición de Nissim dio un vuelco a la situación. Ella se estaba despidiendo de sus compañeros y ahí estaba él, que era como "ver a un ídolo".
Eso sí, "lo más divertido", fue que al principio él "me miró a huevo, porque yo era como bien hippie". Ahí él le propuso que improvisará, ante lo cual, ella sin achicarse, aceptó.
Tras la dinámica que duró unos 40 minutos, Nissim le dijo que "nosotros necesitamos una actriz joven y tú calzas perfecto en el papel". Y ahí vino la pregunta: "¿Te gustaría trabajar con nosotros?".
"Lloré porque..."
Y así partió todo. Mientras Soledad relataba, Paula no pudo evitar soltar algunas lágrimas.
"Si hay algo que reconocer de Nissim es su generosidad", reflexionó Soledad, quien lloró su muerte "porque creo que podría haber estado más tiempo entre nosotros. Lloré, porque cuando uno conoce a gente que te ayudó a encontrar tu vocación, vas a estar agradecido toda la vida".
"Lo que yo primero aprendí del teatro no lo aprendí en la escuela, Paula, lo aprendí de tu padre", declaró.
"Fue un hermoso homenaje" , cerró Paula por su parte. "Nos une algo, que es el amor por el Teatro Ictus y la figura de mi padre, que yo no tenía claro que era tan importante para ella".
Revive acá el emotivo momento
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