"Al mal tiempo, buena cara", parece ser la máxima que eligió Felipe Avello para enfrentar una de las noches más difíciles de su vida: a punta de pistola le quitaron su camioneta.
"Fui a comer con una amiga a un restaurante peruano cerca de mi hogar y a dos cuadras de mi casa, aparecieron los asaltantes", dijo Avello para relatar lo que fue una jornada de locura y, aunque cueste creerlo, de risas.
"Eran cuatro chicos. Se notaban bien niños. Y me insultaron, nos bajaron de la camioneta y ahí quedé", continuó el triunfador del reciente Festival del Huaso de Olmué y cuyo percance con la delincuencia de inmediato se hizo tendencia en redes sociales.
"No he podido ver nada, porque me robaron el celular. Pero supe que estaban con eso de que 'están asaltando a un hueón' (fue parte de su rutina en Olmué), incluso los Carabineros me hicieron el chiste y me lo tomo bien, porque al final por fortuna no pasó nada grave", continuó.
Sin embargo, lo concreto es que eran cerca de las 23.30 del lunes cuando los cuatro individuos que venían de una seguidilla de asaltos se toparon con el "Pececillo" en la intersección de Echeñique con Eliecer Parada, en Ñuñoa. A punta de pistola y de forma muy violenta los hicieron descender del vehículo y se fueron a toda velocidad.
Operativo
Tras superar el shock, Avello se dirigió a la policía donde se topó con las otras víctimas de los delincuentes. Y en ese momento, le tocó el reconocimiento de los mismos.
De acuerdo a la información policial, se activó el plan cuadrante, localizando los vehículos e iniciándose una persecución. Durante el operativo, dos personas fueron atropelladas en Av. Matta con Vicuña Mackenna y resultaron con lesiones leves y trasladadas a un centro asistencial.
De hecho, Dos de los cuatro antisociales dos (uno de 19 años y otro de 15) fueron detenidos en Vicuña Mackenna esquina avenida Manuel Antonio Matta, donde chocaron un árbol uno de los automóviles sustraídos.
Reflexiones. "Siento que estaba poniéndome muy materialista. Mi próxima camioneta tendrá que ser más cacharro, porque yo no soy así", fue una de las singulares conclusiones del humorista para explicar lo que le sucedió.
"Lo más cansador fue que esto pasó a las once de la noche. Y terminé cerca de las seis de la mañana. Me dieron como un catálogo donde reconocí a dos de los delincuentes y Carabineros se portó muy bien en todo momento. Me pidieron selfies, pero prefiero no hablar más de eso porque no sé si podían hacerlo", continuó.
Ya completada la noche de terror, Avello decidió contar su versión y reflexionar sobre lo vivido: "Es una lástima, porque al final son niños, que vienen de una familia donde seguramente el papá es ladrón, el abuelo fue ladrón y pasar por la cárcel será nada para ellos, porque no tendrán chances de rehabilitarse. Yo aprendí que tengo que estar más atento. Y sin dudas que mi próximo auto sea un cacharro más humilde. No seré tan materialista".