A 26 de la publicación del álbum La Espada & la Pared, el tercer disco de la banda penquista, el exbaterista Pancho Molina reveló una de las influencias clave en uno de los tracks del disco que destacó por temas como "Déjate caer" o el cover de "Tu cariño se me va".
En medio de la bonanza económica, los viajes del presidente Eduardo Frei al extranjero y un joven "Chino" Ríos que se hacía notar por su talento y actitud desfachatada en la cancha -y fuera de ella-, la música chilena también pasaba por un período de alta exposición mediática a mediados de la década de los noventas.
Y aunque ya habían algunos nombres instalados -como La Ley-, ese 1995 fue el año de Los Tres. En marzo llegó a las tiendas su tercer álbum con un nombre tan improbable como impactante: La espada & La pared. Un largaduración que tuvo al argentino Mario Breuer de productor, pese a que no enganchó del todo con la banda y en especial con el líder, Álvaro Henríquez. "Aprendí cómo no debe ser producido un disco", respondió en su estilo franco cuando le preguntaron qué había aprendido en el proceso.
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Los Tres en 1995. Arriba: Álvaro Henríquez y Roberto "Titae" Lindl. Abajo: Ángel Parra y Francisco "Pancho" Molina[/caption]
Pero tensiones más o menos, en las trece canciones del disco, el cuarteto desplegó un material que remitía a variadas influencias; desde el dramatismo del bolero, el rockabilly, la balada electrificada de los setentas y el funk. Pero más importante, recuperaban una sonoridad más acústica, propia del primer disco, a contrapelo del sonido más crudo del segundo LP, Se remata el siglo (1993).
En temas como "Hojas de té", "Déjate caer", "Tírate" y "Te desheredo", de alta rotación radial, dejaban en claro que el sonido alcanzó una madurez en que amalgaman sus influencias desde una lectura particular que lo hacía reconocible y popular; rock chileno, en todo lo ancho de la palabra.
Tal como ocurrió a fines de los sesentas, en ese 1995 la banda -como otros contemporáneos- de alguna forma "nacionalizó" un sonido extranjero y lo tradujo a códigos populares, de allí su éxito. Por ello, se dieron el gusto de cerrar el disco con dos versiones; la exitosa "Tu cariño se me va", cantada junto a Buddy Richard, y "All tomorrow's parties", tomado del primer álbum de Velvet Underground.
¿De quién es el groove?
Para quienes participaron en ese álbum, esa propuesta de rock a la chilena aún les hace inflar el pecho. "Orgulloso del álbum: La espada y la Pared. Y de mi trabajo en Los Tres", escribió el exbaterista Pancho Molina en su cuenta de Twitter. Luego lanzó un dato. "Track 'Dos En Uno' es JBrown groove..alguien sabe a cuál track le robé el groove".
https://twitter.com/PanchoMolinaC/status/1372298018502885376
Molina habla de la canción número cuatro; una que no fue single, pero narra la historia de una chica que cocina a su novio en la parrilla. Un relato tomado de la imaginería del líder y vocalista, Álvaro Henríquez, un consumado lector. "Con un cuchillo y un tenedor me fue más fácil partirte en dos", decía en parte de la letra.
Y efectivamente, es un tema que tiene un ritmo tomado del funk clásico, con el bajo de "Titae" Lindl y los riffs de guitarra marcando los clásicos ritmos quebrados. Una propuesta que la emparenta con otros temas del catálogo del grupo como "Somos tontos no pesados".
Hasta que un usuario dio con la respuesta. "Cold Sweat", escribió. "Bammm!!! Si", respondió Molina. Se trata de un tema compuesto por el "padrino del soul" junto al saxofonista y arreglista de su banda, Alfred "Pee Wee" Ellis. Con su estilo particular, Brown lo grabó en mayo de 1967. Fue la melomanía y el gusto de Los Tres por la música del pasado, lo que llevó ese sonido a los surcos de un álbum que finalmente, también hizo historia.