"Yo tenía una obligación, que es la de mantener viva su memoria afirmó el comunicador.
La semana pasada, Rodrigo Herrera se refirió por primera vez a su traumática despedida de Mega.
De hecho, se sinceró y dijo que "no fue muy prolijo (…), primero que todo se filtró. Yo conversé con los ejecutivos para que no me hicieran lo que pasó con José Antonio Neme, que lo querían hacer. Que era terminar un noticiero y el Mucho Gusto y chao. Pero salió en un portal y se les filtró. Yo estaba con licencia… uno tiene sus contactos".
Sin embargo, este miércoles vuelve a la palestra debido a que confesó como logró pasar un difícil momento familiar, el que lo venia atormentando desde que nació.
Rodrigo Herrera sin filtro
"Mi hermano falleció cuando era muy chico. Como mi hermano falleció un año y medio antes de que yo naciera, yo durante mucho tiempo sentí que yo llegué a mi casa a ocupar el lugar que ocupaba él", lanzó de entrada en el programa "Cocina Fusión".
Además, agregó que "yo creo que eso era una realidad. Hasta el día de hoy a mi mamá le cuesta mucho convivir con lo que pasó hace mucho tiempo. Yo de verdad sentía que no estaba caminando con mis pies, con mi historia, sino que yo llegué a reemplazar el lugar de mi hermano".
"En un principio, cuando uno es chico, uno no se da cuenta de esas cosas. Yo empecé a tomar conciencia de eso cuando ya estaba en la universidad. Yo necesitaba resolver este tema", enfatizó.
Sin embargo, reveló una especie de ritual que tuvo que hacer para eliminar esta carga. "Entonces, me determinaron junto a mi madre, ir al cementerio donde está mi hermano. Que yo le comprara las flores más lindas que pudiera encontrar, llevar un cordel rojo y unirlo desde mi ombligo y la tumba de mi hermano y que mi mamá lo cortara", sostuvo.
Finalmente aseguró que "a su vez, yo tenía una obligación que es la de mantener viva la memoria de mi hermano. Les prometo que esa mochila que sentía, ese peso, lo dejé de sentir".