La actriz retomó una relación tras seis años, aunque con presentes bastante distintos. También habló de su presente orfebre, de su hija y el regreso de El Muro (CHV).
Ingrid “Peka” Parra había vuelto a las pistas del amor, pero quería mantenerlo en reserva junto al al músico Rafael Soto, con quien se reencontró románticamente tras seis años. Todo discreto hasta que fueron paparazeados a los besos por Glamorama en el Casino Monticello durante octubre del 2024.
Dos meses después, a fines de diciembre, la actriz recién se animó a oficializar públicamente la relación, al compartir unas navideñas postales junto a Rafael; y días después se refirió a su situación sentimental en entrevista con LUN.
Un día iba manejando con un cafecito en la mano y, de pronto, sin saberse disponible para el amor —a casi un año del quiebre con el padre de su hija, Emma—, le entró una curiosidad: “¿Qué será de Rafael?“. Lo siguió por Instagram, le escribió y retomaron un amistoso contacto que convirtió en un renovado pololeo. ”Lo habíamos tratado de esconder lo más posible", aseguró ahora ella a La Cuarta, con quien andaba dichosa junto a Rafael en la gala de los Premios Copihue.
—¿Por qué lo querías esconder?
—No lo quería esconder por nada particular, sino que queríamos cuidar un poquito la relación y que no se tocara tanto tema porque más encima es mi expololo. Estuvimos seis años anteriormente juntos, nos conocemos bastante, ya sabíamos a lo que íbamos si salía en la prensa; por eso queríamos proteger un poquito lo que teníamos. Era eso hasta que Glamorama nos descubrió y nos paparazeó.
—¿Cómo ves el factor de le exposición?
—Es más tema para Rafa. Rafael es más piola, es músico y trabaja con artistas chilenos (como el mismísimo Luis Jara). Él es más piola, él quería cuidar un poco más la relación. Yo trabajo en televisión, en los medios de comunicación, entonces era bien poquito lo que se podía cuidar.
En lo que a Peka respecta, “prefiero que se sepa, siempre he sido así, super abierta; nunca he escondido nada”, declara. “De hecho, en mis mismas redes sociales cuento todo”, en vista de que “nunca he tenido tema con contar las cosas”.
— ¿Cambian las personas en seis años?
—Cambian, cambian heavy, para bien. Rafa ahora está más grande, yo también. Estamos más maduros, tenemos otras visiones de futuro, estamos enfocados en otras cosas. Antes era como pasarlo bien, éramos jóvenes y alocados ahora estamos más tranqui.
Acto seguido, Peka ve que Rafael anda orbitando cerca y sugiere: “Ahí está, pregúntale”, quien con humor instruye a su pareja de qué responder sobre la pregunta de los cambios y el tiempo: “Yo dije que sí, no metai las patas”.
—Sí, cambian las personas —contesta él—. Cambiamos, por supuesto. Más maduros. Más experiencia. Pasó agua debajo del puente.
En el pasado, cuando ambos decidieron separar sus caminos, no habría sido por falta de amor, sino por planes de futuro diferentes: ella buscaba formar familia, mientras que él quería enfocarse en su carrera musical.
El presente de Peka
Peka sigue viviendo de su faceta de orfebre, con su emprendimiento Ingridparrataller: “Paso el dato, me pueden encontrar en Instagram”, dice. “Trabajo 100% en eso”. Si bien cerro el local físico que tenía en el Panorámico, Providencia, sigue con la venta online. “La gente confía mucho en mi trabajo, entonces cerrar la tienda no fue tan terrible, la verdad”, aclara optimista. “Ahora recibo a la gente en mi taller”, por lo que “es mucho más personalizado que antes y estoy feliz”.
A inicios del 2024, Peka contó que pasó por un delicado proceso de depresión, derivado de su primera etapa de maternidad, el quiebre amoroso con Cristián Sales y posterior mudanza a un departamento. Al respecto, actualizó: “Estamos en perfectas condiciones”, para luego alzar su copa y una risa: “Salud por eso”.
Sobre su retoña, Emma, de tres años, comenta que la pequeña “está bien, está grande, está divertida y está tranquila”. En cuando a ella como madre, “también estoy mucho más tranquila, más centrada y super enfocada en cuáles son mis objetivos en este año”.
—¿Cuáles objetivos?
—Crecer. Necesito que mi emprendimiento crezca aún más. Necesito que mi carrera como actriz crezca. Estoy en dos obras de teatro, así que sí o sí crece. Estoy en Perfectos Desconocidos, que fue un hit en teatro; y en marzo Tres torpes tríos con Renato Munster y la Katty Kowaleczko, una comedia con la ya hemos estado en algunos festivales últimamente, y nos ha ido increíble en la recepción del público, muy entretenido y me han criticado super bien. Así que bacán. Crecer, nada más que eso.
Sobre el regreso de Kike Morandé a la TV con Detrás del muro (CHV), Peka, quien fuera parte del Morandé con compañía (Mega), lanzó con humor: “No lo veo”, y luego, ya en serio, destacó: “Bacán que vuelva el humor, que vuelva la gente, que se divierta”, porque “se necesita más humor en televisión”. Y añadió sobre el elenco conformado, de momento, por quince actores fijos:
—Ojala me llamen.
—Sigues con ganas...
—Por supuesto. Es un tremendo programa. Lo pasé super bien, crecí muchísimo como actriz y aprendí mucho. Les deseo todo el éxito del mundo.