La actriz pretendía pasar unos días de relajo en el sur trasandino, pero el acoso de los medios terminó por aburrirla.
Lo que serían unos días de relajo al sur del mundo terminó en un bullado escándalo entre la actriz Scarlett Johansson y un grupo de periodistas que la seguía en sus aventuras.
La rubia llegó a Buenos Aires para vivir una románticas vacaciones junto a su novio, el actor y comediante Colin Jost. La protagonista de "Los Vengadores" aprovechó los días al otro lado de la cordillera para conocer las bondades de la cocina argentina y se embarcó en un avión privado a la localidad de Calafate para conocer los glaciares, específicamente el Perito Moreno. Además, organizó visitas privadas a los lagos y una visita a pie por los Bosques de Lengas, para disfrutar de su glaciares y de una laguna cubierta de témpanos de hielo.
Según publicó Clarín, el drama fue al regreso a Buenos Aires, ya que apenas puso un pie en el aeropuerto Jorge Newbery (Aeroparque) sintió el acoso de la prensa trasandina que de inmediato la abordó para tener una declaración o una fotografía.
A pesar de que intentó pasar lo más desapercibida posible, pasados unos minutos Johansson perdió la paciencia y comenzó a increpara a los reporteros gráficos y a intentar ocultar su rostro con las manos. La cosa pudo pasar a mayores, cuando en su afán por esconderse, la actriz paso a llevar una mampara de cristal que retumbó en todo el recinto.