Fernando Pinto se desplomó cuando terminaba de grabar exclusivas imágenes que dieron que hablar en el país.
Profunda tristeza dejó en Chilevisión la inesperada muerte de un querido camarógrafo del departamento de prensa del canal. El profesional sufrió una afección cuando cubría un importante hecho policial, de madrugada.
La mañana de ayer jueves Julio César Rodríguez interrumpió el matinal para informar el sensible fallecimiento de Fernando Pinto, de 49 años. “Estamos muy dolidos todos. Lo recordaremos siempre como el gran profesional que fue y un gran amigo”, expresó el animador, notoriamente afectado.
El mismo JC comentó en pantalla que el profesional falleció “en una situación muy ingrata”, pues estaba trabajando cuando sufrió los primeros síntomas de un aneurisma que resultó fatal.
Camarógrafo de CHV fallece tras importante reporteo
Los hechos se remontan a las 4 de la madrugada del viernes pasado, en el exterior de la Cuarta Comisaría de Santiago. Allí, Fernando estaba al pie del cañón esperando la llegada de uno de los supuestos miembros del Tren de Aragua que, tras salir en libertad por un error judicial, se entregaría a la justicia.
Estaba junto a dos periodistas del canal y las imágenes que logró captar con su cámara fueron exclusivas.
Cumplida la misión, Fernando se desplomó en la vereda. Asustados, sus compañeros trataron de reanimarlo, pero no pudieron. El conductor del auto incluso sabía de maniobras por su experiencia como bombero. Él se dio cuenta que podía ser grave y lo llevaron de urgencia a un hospital.
El personal de salud confirmó que se trataba de una situación difícil y pidieron que contactaran a la familia del paciente. Allí permaneció hospitalizado hasta su fallecimiento, el día miércoles recién pasado, debido a un aneurisma.
Fernando Pinto deja dos hijos de 13 y 9 años, con quienes compartía el tiempo libre que le quedaba durante el día. Era uno de sus grandes motivos para elegir el turno de noche.
El periodista Marco Orellana contó a LUN sobre aquello: “Tenía el cansancio normal de trabajar a esa hora, pero nada más. Nunca lo vi mal. A él ese horario le servía porque podía cuidar a su sobrina y ver a sus hijos”.
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