El humorista dijo haber recibido amenzas de muerte y tuvo una reunión de emergencia con los organizadores del Festival de Viña.
Nada bien la estaría pasando el comediante venezolano George Harris, al notar las reacciones que generó su confirmación para la noche inaugural del Festival de Viña del Mar 2025.
El estandapero ha sido blanco de fuertes reproches por antiguos dichos en contra de Salvador Allende y por trapear con el Presidente Gabriel Boric en una de sus rutinas. Incluso, algunos iniciaron una campaña para que sea bajado de la parrilla festivalera.
En medio del escándalo, el humorista fue citado a una reunión por ejecutivos de Mega y de la productora Bizarro, encargados del evento, el martes recién pasado. La cita se realizó por Zoom y su objetivo era hablar sobre la polémica.
George Harris denunció amenazas de muerte y reconoció angustia
Según una fuente de La Tercera, que estuvo en la reunión, a Harris se le notaba “inquieto, asustado, confundido y preocupado”, luego de ver sus redes sociales colmadas de mensajes “increíbles”. Aseguró que incluso recibió amenazas de muerte, donde le advertían que se cuidara lo que comiera en Chile.
Con evidente tristeza, confidenció que todo eso le provocó una angustia muy grande, que no ha logrado calmarse y que nunca en su vida habría imaginado que su trabajo podría provocar amenazas de muerte. En ese instante se quebró ante los representantes del festival.
En su defensa aseguró que la política no es lo suyo en las rutinas y que solo es un venezolano que corre cuando oye hablar sobre la izquierda, pues ese sector tenía “sumido a su país en la decadencia”, publicó el citado medio.
Admitió además, que había pensando en renunciar en esa misma reunión, pero los ejecutivos le hicieron barra y lo conminaron a quedarse. Argumentaron que hicieron estudios previos y que esa noche estarán también Marc Anthony y Bacilos. También le recordaron que ya ha llenado un Movistar Arena en Santiago.
De esta manera, de acuerdo a LT, por ahora Harris sigue firme en su debut en la Quinta Vergara, en lo que sería el número más esperado por la tensión que se ha generado en la previa. De hecho, ya están agotadas las entradas para la noche festivalera del domingo 23 de febrero.