La próxima edición del Copihue de Oro tendrá un carácter solidario y nadie quiere quedarse fuera. Personajes de todas las áreas, edades y oficios buscan ser parte de la cruzada que este año reunirá fondos para los emprendedores de Valparaíso que se vieron afectados por los incendios del 2019.

Una que puso dedito para arriba de inmediato para cooperar con los que más lo necesitan fue Ignacia Antonia, la influencer que colapsa la banda ancha con sus videos de baile, ya sea en YouTube o Tik Tok.

Para el próximo 20 de marzo, la joven donará 10 ejemplares de sus libros ("Atrévete a soñar" y "El sueño continúa") y la misma cantidad de sus reconocidas poleras, para rematarlas y juntar lucas para las Pymes.

"Es importante que cambie un poco el concepto y puedan hacer la subasta, pensando en el contexto que estamos viviendo en el país. Que no solo sea mirado como un día para ganar premios y sentirte bien", dijo Ignacia.

De paso, la influencer explicó que donará sus libros por una sencilla razón: "Son lo más importante que tengo. Para mí era un sueño poder hacer un libro, y lo logré. Qué mejor que eso".

- ¿Oiga, y las poleras?

Eso es un poco más nostálgico. Cuando partí en las redes sociales hacía juntas en parques públicos y empecé a recorrer Chile, pero necesitaba de alguna manera financiar los gastos de los viajes, así que empecé a hacer poleras. Es un recuerdo muy bonito de cuando me inicié, hace tres años. La polera marca el comienzo de mi carrera como influencer y los libros, un después.

- ¿Cómo recibe la nominación al Copihue de Oro?

Estoy muy feliz solamente con estar nominada, siento que ahora se están tomando más en cuenta las redes sociales. Todos los nominados en la categoría de "Influencers" somos muy distintos, como que no hay punto de comparación.

- Llegaron para quedarse...

Es lindo que se nos dé el espacio, porque en el fondo son 'los' premios que hay en Chile, en otros países hay muchos premios que reconocen distintas áreas y las redes sociales tienen mucha importancia. Entonces, pensar que avanzamos y les pisamos la cola a otros países, es bacán.