El recordado notero contó que se quedará en Chiloé con sus retoños de 12 y 8 años tras la muerte de su esposa. “La idea es que crezcan felices”, explicó.
La semana pasada, el recordado notero de televisión Patricio Oñate reveló la dolorosa noticia de la muerte de su esposa, María Cecilia Briceño, tras una dura batalla contra el cáncer.
A través de sus redes sociales, el comunicador dio a conocer la noticia junto a sus dos pequeños hijos, Nicolás y Clemente, de 12 y 8 años respectivamente.
Ahora, a casi una semana de la partida de su esposa, Oñate conversó con LUN y reveló detalles sobre cómo continuará su vida junto a sus retoños en Chiloé.
El exnotero y su esposa habían decidido que sus dos hijos fueran educados en casa y que rindieran exámenes libres. Con respecto a esto, Oñate explicó que “si hay que tengo decidido es que me quedo en Chiloé y que mis hijos seguirán aprendiendo sin ir al colegio”.
“La idea de hacer mi vida acá es que siento haber encontrado el lugar donde soy feliz. Tengo trabajo en la Municipalidad, tengo amigos que sé que están ahí cuando uno los necesita. Ahora entiendo por qué mi señora quería venirse para acá”, aseguró el comunicador.
Sobre la educación que le brinda a sus hijos en casa, Oñate indicó que no creía que les pudiera perjudicar a futuro. “Ellos han aprendido de todo y, además, son felices. Nico es un astro tocando acordeón y también es un capo jugando ajedrez, al igual que Clemente. Además los dos cantan. Yo quiero incentivarlos para que sigan haciendo eso”. detalló.
“Para nosotros con María Cecilia tan importante como que nuestros hijos supieran de matemáticas o de historia es que aprendieran a tocar acordeón y que hicieran actividades que los motiven. La idea es que crezcan felices”, añadió.
“¿No es esa la verdadera misión de los padres?”, sentenció Pato Oñate sobre la educación de sus retoños.
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