La Fiera se sinceró y detalló sin filtro el divertido y vergonzoso episodio que vivió con la mamá de su ex en un estadio, descolocando a Jordi Castell con su historia.
Pamela Díaz estrenó este pasado viernes su nuevo programa de conversación en CHV, Terrazas Stones, que contó con la participación de Jordi Castell en su debut.
En el espacio, la Fiera y el fotógrafo tuvieron una divertida conversación con varias confesiones y muchas risas. Fue en ese contexto que Pamela reveló la tremenda vergüenza que pasó con su exsuegra, la mamá de Manuel Neira.
Todo comenzó con una pregunta de Jordi, quien le pidió a la morena contar la “peor vergüenza” que ha pasado con alguna suegra.
“Ah, pero es que es muy sucio”, partió reclamando Pamela.
“Me tuve que ir a mi casa”
Tras esto, explicó que “fui al estadio, estaba con la Inés, que le mando un beso, lo mejor que tiene Manuel, la mamá”.
“La cosa es que estaba en el estadio, Unión Española, ahí jugaba. Me vestí de blanco, con un buso blanco y una polera blanca, un peto, una cosa así, en ese tiempo era muy lola”, continuó relatando.
Fiel a su estilo y sin filtro, Pamela confesó que “tomaba una pastilla que me hacía ir al baño, no la voy a decir para que no la tomen. La cosa es que me dieron ganas de ir hacer del dos y me salió una cosa poca (...) en eso algo sin querer y sentí algo raro”.
“Sentí algo raro y mi ex ex ex ex suegra me dice: ‘Pame ve… parece que te sentaste arriba de chocolate, caca, algo así’. Yo le digo ‘¿cómo se le ocurre? no sea desubicada…'. Me miro y me tuve sacar el polerón que tenía en el cuello, me lo amarre aquí (en la cadera), me tuve que ir a mi casa”, relató la morena.
Finalmente, mientras Jordi seguía descolocado, Pamela señaló que “casi me hice, pero no me hice, fue una cosa como un destello, un destello de luz”.