Los duques de Sussex se robaron el show en partido de Los Ángeles Lakers y Memphis Grizzlies, y el hijo de Diana protagonizó el momento de su vida.
El príncipe Harry y Meghan Markle aparecieron en el Crypto Arena de Los Ángeles (California) para presenciar el partido entre Los Ángeles Lakers contra los Memphis Grizzlies.
Los duques de Sussex se sentaron en uno de los palcos para tener más privacidad, pero la Kiss Cam o cámara de besos los cachó igual. Así que apenas los enfocaron, ellos sabían que debían darse un besito.
Fue en ese momento que Harry se acercó a su esposa, sin embargo, Meghan no encontró nada mejor que echarse a reír. La duquesa además le agarró del brazo, como si no quisiera besarlo, así que el hijo de Diana de Gales y el rey Carlos III se quedó con las ganas y con cara de “si la cago me avisan”.
El momento se viralizó rápidamente en redes sociales, y no solo por el particular intento de beso, sino también por lo felices y relajados que se veían. Además, Meghan ya lucía su renovado look.