Durante los últimos días, Mauricio Pinilla estuvo en el ojo del huracán. Y cómo no, si recibió una ola de críticas tras su crítica sin filtro al gobierno de Gabriel Boric por el proyecto de eliminar la tenencia de armas.

“Que estupidez eso de querer eliminar las armas a los que las poseemos por deporte, legítima defensa y de manera legal”, escribió el ex jugador de Universidad de Chile hace un par de días en Twitter.

Desde ese momento, varios se le fueron encima e, incluso, se habló sobre un supuesto llamado de atención desde TVN. Esto, sin contar el cahuín de pasillo donde aseguran que el ex delantero se creyó el cuento y se cree “el Brad Pitt” en los pasillos del “canal de todos”.

Y en ese contexto, este martes fue Raquel Argandoña quien alzó la voz y habló sobre Pinilla. Eso sí, más allá de la polémica en la que se vio envuelto, se enfocó en su rol de animador y las expectativas que se depositó en él desde que llegó a la estación pública.

“Le han dado muchas oportunidades, como a nadie, y las ha aprovechado”, dijo de entrada la comunicadora en el Zona de Estrellas. Eso sí, en esa misma línea le puso un “parelé” a su rápido ascenso en la tele a color.

“Si se creyó que podía ser el animador del Festival de Viña, creo que fue una broma de mal gusto, recién está entrando a la televisión para que se pare sobre ese escenario”, afirmó la “Quintrala”.

Además, la ex panelista del Bienvenidos aprovechó de aconsejar al rostro de TVN. Y en medio de su reflexión, sacó a colación a Felipe Camiroaga, con quien fue comparado en un minuto.

Los consejos de la Raca

“Se tiene que ir soltando un poco y puede ser un gran animador, nunca como Felipe Camiroaga porque muchos lo quisieron comparar ahí”, aseguró.

“Lo malo, y a lo mejor me voy a llevar el odio de mucha gente, es el tatuaje en el cuello, es poco elegante y pierde fineza”, complementó.

Por último, también se distanció de quienes relacionan su estilo con el de JC Rodríguez. Esto, luego de que Mario Velasco hiciera un comentario al respecto en el programa.

“No lo compares, Julio César que no me cae muy bien, pero debo reconocer que es un excelente profesional, un tipo culto, preparado, cercano a la gente. Un poquito populista a veces. Mientras, Pinilla le quedan años”, remató.