Panelista del reality de Chilevisión reveló por qué tomó la decisión de salir del estudio y evitar el confrontamiento con el último eliminado del espacio.
Un tenso momento fue el que se registró la noche de este lunes en Gran Hermano, donde Fran García-Huidobro no se aguantó y decidió salir del estudio.
Según explicó, no quiso estar en el panel con Fernando Altamirano, más conocido como Bambino, el último eliminado del reality de Chilevisión.
“Voy a tomarme una atribución que podría costarme la pega. No me gustaría tener ningún tipo de conversación con Fernando”, avisó de entrada.
Luego, reveló que el participante “fue eliminado de la casa, según mi humilde opinión, por tres razones: por flojo, por machista, pero por paliza, por las cosas que dijo sobre Bigote”.
“No quiero interactuar porque no tengo nada que ver ni quiero tener nada que ver con una persona que se refiere así a los animales”, complementó en alusión a las polémicas que tuvo en el encierro con el perrito de la casa.
Sin embargo, la Fran fue más allá y, en sus clásicos análisis de todas las noches en redes sociales, donde habla sobre lo ocurrido en el programa de TV, contó detalles de lo sucedido en pantalla.
“Estuvo difícil el capítulo de hoy. Les confieso que estuve desde anoche pensando cómo iba a enfrentar esto, cómo me iba a sentar con él a discutir de las razones por las cuales fue eliminado de la casa”, relató.
Y en esa misma línea, recalcó que su decisión de abandonar el set “fue la mejor, porque yo soy polvorita, enojona y caliente. No quería enfrentarme en un ‘cara a cara’ con Fernando, en el que ―evidentemente― él iba a salir perdiendo”.
“Creo que le dije mis razones… las comenté en general y traté de ser super respetuosa. Yo sé que mi cara a veces representa lo contrario, pero siento que evité un dolor innecesario y fue la manera que tuve de zafar”, complementó.
Además, sostuvo que “después de eso preferí irme del estudio, porque sí… porque no quería estar ahí. Sé que él después se deshizo en disculpas. Y entiendo que es un chico joven, que no se dio cuenta de lo que había hecho, pero a mí me ponía de muy mala onda tener que conversar con él”.
Luego, y después de recibir algunos comentarios en las redes sociales, reiteró que “yo solo le debo explicaciones a mi jefe, a nadie más”. Incluso, bromeó con que ella no es la “dueña de casa”, y que ese papel recae en Diana Bolocco. “Yo simplemente arriendo una pieza en Gran Hermano, los lunes y martes”, tiró la talla.
“Les agradezco a todos que hayan entendido. Y a los que tiran mala onda, cambien de canal y no me sigan. Prefiero perder mil seguidores que ser hipócrita y no decir lo que pienso y no hacer lo que siento. Voy a cumplir 50 años, de los cuales 28 estoy trabajando en TV. Y no aceptaría estar en un formato como este si me censuraran. Esta fue una decisión personal, en que pude haber puesto en juego mi trabajo… por suerte no. Nadie me obligo, nadie me censuro, yo simplemente no quise estar ahí”, remató.
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