Historia de una mujer que le cortó el miembro a su ex pareja impactó a los animadores del espacio y se convirtió en el momento más duro que ha vivido el programa de TV+.
Tan inesperada como sorprendente resultó ser la reveladora historia que una televidente le contó anoche a los tres animadores del programa de amores y desamores de TV+ Cariño Malo, quienes quedaron de una pieza al escuchar por teléfono el relato de una afligida mujer.
Y es que lo que ocurrió ayer en el estudio del canal fue algo que Cristina Tocco, Bárbara Rebolledo y Daniel Valenzuela no imaginaron ni siquiera en sus peores pesadillas, a pesar que en temas de amor y odio nunca se sabe.
Una mujer de cinco décadas, identificada como Ivón, relató con lujo de detalles la infancia llena de abusos que vivió y cómo eso la llevó a cometer uno de los actos más insólitos de los que se tenga recuerdo en el espacio de TV+ para poder defender a su hija de 13 años ante el acoso que, su entonces ex pareja, le realizó a la pequeña en 2005.
Ivón contó que descubrió al hombre espiando a su hija mientras se duchaba, situación que la llevó a advertirle a su ex pareja que de repetir el acoso, tendría que atenerse a la consecuencias.
El tiempo transcurrió, pero el hombre repitió la escena, aunque en esa oportunidad lo hizo mientras se tocaba. La indignada madre vio la escena y al rato le recomendó al tipo que tuviese cuidado y era mejor que se durmiera boca abajo.
Con la imagen aún fresca en su mente, la mujer agarró un cuchillo y un día cualquiera le realizó un corte en la parte inferior del pene al hombre, no sin antes aclararle a su ex que su miembro "ahora solo te servirá para ir al baño".
Impacto en el estudio
Tras escuchar el descarnado relato de Ivón, los tres conductores quedaron atónitos y, en un principio, no supieron qué decirle a la mujer.
"Fue muy impactante escucharla. Eso sí, el caso tenía varias aristas. Ella venía con una infancia marcada por los abusos. Ella tiene ciertos códigos para entender conductas de abusos. Eso sí, nada justifica lo que hizo", dijo Daniel Valenzuela.
Cristina Tocco, en tanto, aclaró que el caso de Ivón no tiene justificación. "Ella indicó que lo hizo para proteger a su hija. Eso sí, él la espiaba, pero no llegó a abusarla. Él podría haber muerto desangrado, y ella haber ido a la cárcel. Ella comentó que el sujeto asumió que había espiado a la niña. Pero el nivel de violencia no se entiende", precisó.
Las tristes vueltas de la vida
Los hechos descritos en "Cariño Malo" ocurrieron en Antofagasta e Ivón, a 14 años de sucedido el hecho, explicó a La Cuarta la situación.
"Yo me entregué tras hacerlo. Luego, él mismo asumió que espió a mi hija. Estuve presa un par de horas, sin embargo, tuve que ir a terapia de ira. Me dieron una orden de prohibición para acercarme a él", reveló.
- Si se viera en esa situación ahora, ¿lo volvería a hacer?
Volvería a hacer exactamente lo mismo.
- ¿Por qué crees que en su tiempo no hubo tanto revuelo con este caso?
Si se lo hubiese cortado entero habría salido en los diarios. Acá hay muchas cosas que se ocultan. Pasó como violencia intrafamiliar. Él reconoció que la había espiado.
-¿Y cómo está su hija?
Ella murió, fue víctima de un femicidio en Antofagasta, en 2012. Tenía 20 años cuando la mataron.