Tras un exitoso paso por el Festival del Huaso de Olmué, la agrupación lanzó su sexto álbum de estudio “Baile Infinito” y dejó para el final el lanzamiento de su canción con la banda argentina. En una conversación con La Cuarta, el vocalista Rodrigo Medel nos contó detalles de este nuevo disco, el trabajo con Moska y Mariano de Los Auténticos Decadentes, su opinión acerca de la música urbana y los próximos proyectos de la banda. “Se viene un documental”, contó al diario pop.
A finales del mes de marzo, Tomo Como Rey sorprendió a sus fanáticos y lanzó su sexto disco de estudio, “Baile Infinito”. Con la producción de Martín “Moska” Lorenzo y Mariano Franceschelli de Los Auténticos Decadentes, el álbum llegó casi ocho años después de su última entrega, “La Fiesta Popular” (2016).
Durante este verano, la agrupación de cumbia-ska debutó en el Festival del Huaso de Olmué 2024 con una aplaudida presentación en la que compartió escenario con Tommy Rey, con quien tienen una divertida anécdota, Amaya Forch y la banda El Bloque 8.
Junto con el lanzamiento de su nuevo álbum, el grupo también reveló la especial colaboración con Los Auténticos Decadentes, “Es lo que hay”. Si bien el disco se publicó en marzo, la canción se estrenó una semana tras un problema que llevó a una “miniserie” en redes sociales para encontrar el tercer tema del disco.
En una conversación con La Cuarta, el vocalista y líder de la banda Rodrigo Medel nos reveló detalles sobre el nuevo disco de Tomo Como Rey, su colaboración con Los Auténticos Decadentes, la presentación en El Patagual y nos adelantó que se viene a futuro para la agrupación.
“La sensación de poder volver a sacar un disco para los que somos músicos es genial, es como cambiarse de casa, como pegarse un viaje, como cuando te compras tu primer auto”, confiesa el cantante al diario pop.
- Es una nueva etapa
-Por supuesto. Por lo general, los álbumes van marcando una etapa, una forma de hacer música. Ciertos colores, ciertos patrones que se van dibujando con la salida de un álbum, porque siempre son medios conceptuales. Este se llama ‘Baile Infinito’, el anterior ‘La fiesta popular’, antes “Prohibido’. Cada uno de esos tiene como una energía, lo que uno quiere proyectar, es como ‘esta es mi armadura para esta época de la vida’.
-El disco salió el 28 de marzo y hace poco sacaron su canción con Los Auténticos Decadentes, “Es lo que hay”, que también es parte del álbum.
-Lo choro que hicimos es que lanzamos el disco, pero la canción 3, “Es lo que hay”, venía mala. Aparecían unos símbolos, partía sonando, pero después se echaba a perder. Entonces hicimos todo un operativo por redes sociales, para activar también TikTok, porque la mayoría de la banda tenemos entre 35 y 40 años, no estamos tan familiarizados con el uso de TikTok. Empezamos a hacer una miniserie de qué había pasado con la canción 3. Finalmente, el misterio se pudo resolver y una semana después, el 4 de abril, liberamos la canción “Es lo que hay” y el disco apareció completo.
-¿Cómo surge la idea de hacer una canción con Los Auténticos Decadentes?
-Nos conocemos personalmente hace como 10 años. Pero la música de Los Decadentes está en el ADN yo creo de todos los que somos de esta parte del mundo. En Latinoamérica, los Decadentes son muy potentes, son los himnos más bacanes de la música de fiesta, de alegría. “El Murguero”, “Corazón”, “Los Piratas”, son puros himnos. Tienen canciones muy bonitas, son muy alegres también.
“Ellos eran los productores musicales, Mariano Franceschelli y Martín “Moska” Lorenzo. Producían a unos amigos nuestros que también son argentinos, Los Caligari. Nosotros nos hicimos primero amigos de ellos en México en 2014, empezamos a hacer una amistad primero personal y después musical. A mí me empezó a gustar la forma que tenían de enfrentar los procesos creativos, empecé a averiguar y me dijeron ‘estamos trabajando con Los Decadentes’, con Mariano y Moska. Me dieron el contacto, les hablé, fluyó y empezamos a trabajar. Ya es el segundo disco. Primero fue ‘La fiesta popular’ (2016) y este ‘Baile Infinito’, que lo grabamos el 2022″.
“Pero nunca habíamos tenido la suerte de tener un featuring con ellos. También se dio y ellos mismos dijeron ‘che, esta canción está para que la cante Cucho Parisi’. Cuando me dijeron eso, yo respondí ‘no se diga más’. Ese fue el primer desafío y el segundo, ya más complicado, era cómo hacemos para grabar el videoclip. Coincidió que ellos vinieron a hacer una gira en Chile, durante febrero hicieron muchas fechas y ahí entre una prueba de sonido y un show, los agarramos, y grabamos con Cucho, Mariano y Moska”.
“Ahí estamos avanzando, la canción ha sido muy bien recibida por las radios. Esperamos que empiece a rotar porque nos ha costado un poquito meter la música nueva, porque también tenemos, afortunadamente, algunas canciones bien potentes, algunos himnos como ‘Arriba de la pelota’, ‘Borrachos al poder’, ‘Niño Maravilla’, hartas canciones que están en el consciente de la gente. De repente uno llega con algo y tiene que ser igual o mejor que lo anterior. Pero nuestro desafío siempre ha sido nunca hacer canciones iguales a las otras. Siento que hay bandas que eternamente son como un gran disco, son buenas, pero suena como una gran canción. A mí me gusta ir cambiando de sonido”.
El Baile Infinito de Tomo Como Rey
-¿Cuál ha sido la recepción de los fans?
-Leí un comentario en Youtube que me gustó mucho que decía, muy simple, ‘wow, el punto más alto de su carrera’ y es un fan que no conozco, no sé ni siquiera si será fan. Para mí, qué orgullo que haya una persona que siente eso, después de 20 años. No sé, la primera canción que sacamos que se hizo conocida fue ‘Niño Maravilla’ y se hizo conocida en 2011-2010. Y 14 años después, que una persona sienta eso, para nosotros es un honor. Para mí que soy el encargado de hacer las canciones, es un orgullo. Los fans hace rato que están esperando un álbum de la banda. Después de que sacamos ‘La Fiesta Popular’, sacamos un disco doble en vivo en la pandemia y sacamos sencillos también, ocho o nueve, que prácticamente también es como un álbum. Estas canciones la mayoría fueron compuestas durante la pandemia. Estaba esa necesidad de poder darle a nuestra gente la música que teníamos preparada. Nuestros fans, los más duros, los más cercanos, quedaron fascinados.
“Se vienen más sorpresas, más videoclips, queremos invertir en eso, en redes. Ahora viene una temporada baja que es el invierno, que no se toca mucho, pero vamos a seguir ingeniándolas para mantenernos conectados”.
-Me quería detener ese comentario, ¿tú lo sientes así, que están en el punto más alto de su carrera?
-Siempre, en todos los procesos, cuando nos dedicamos a producir cosas, ya sea un clip, una gira, un álbum, siempre le ponemos todo el corazón, que salga del alma. No lo hacemos por un tema de fama, o de ganar plata o de que esto simplemente es nuestro trabajo. Es más que eso. Yo siento que llegamos a un nivel de maduración… Bueno, este año partimos con el Festival de Olmué, una gira de verano maravillosa, entre enero y febrero fueron 16 shows. Estamos totalmente vigentes, no estamos tal vez en el ‘prime’ en el sentido de la fama, porque hoy día está el trap y la música urbana ocupando esos espacios. De hecho, Cris MJ creo que es el chileno que logró un récord histórico al entrar entre los 200 más escuchados del mundo, nosotros estamos muy lejos de eso. Pero sí creo que llegamos a un nivel de profesionalismo y de pulcritud en nuestro trabajo que me hace sentir feliz y orgulloso. Si significa después producciones, shows, entrevistas, eso todo bien. Pero desde el punto de vista interno, como de satisfacción personal, creo que estamos efectivamente en uno de los momentos más lindos de nuestra carrera. Ha sido un camino enorme, yo no tenía estas canas en la barba cuando comencé.
-Ustedes partieron en el colegio
-Cuarto medio A del Instituto Nacional. Y era una broma esto. Yo estaba preparando la Prueba de Aptitud Académica en ese tiempo. Y ha sido mi vida. Yo igual estudié periodismo, me titulé, trabajé un ratito en un medio, pero la música es otra cosa. Dedicarse a esto, hacer discos, poder componer. Ahora como vienen temporadas más lentas, viene mi momento donde me pongo a componer, así que ya tengo varias ideas.
“Me encantaría seguir sacando álbumes, pero es muy caro y a veces es mejor concentrarse en hacer un par de canciones o en realidad sencillos. La digitalización de la música hizo que fuese más fácil lanzar la música, para que la gente la escuche, pero también hace que todo sea mucho más desechable, más pasajero. Antiguamente había artistas que giraban con dos o tres canciones durante dos años. Hoy en día a nadie le importa un disco, solo a los músicos, a los fanáticos”.
-Además que sacar un disco toma mucho más tiempo…
-La primera canción que tengo del álbum es del 2019, cinco años atrás. Dos años y medio haciendo 40 canciones que compuse y de esas quedaron 8, después hicimos otras más, Quedaron 12, después dije ‘estas 3 que no quedaron, igual quiero que queden’ y fueron 15 canciones que tiene este álbum. Es súper caro hacer un disco. Aparte nosotros nos quisimos pegar un gustito, fuimos a grabar a Buenos Aires. En uno de los estudios más bacanes que hay en Argentina, con un ingeniero ganador de Grammys, Álvaro Villagra, que trabajó con Santana, Gustavo Cerati, Charly García. Un gallo de verdad, a parte un gallo muy inteligente. Grabamos todos juntos, análogo, nada de autotune. En ese tiempo estábamos viendo ‘Get Back’, el documental de The Beatles, queríamos como emular un poco eso. Hicimos una pre-producción acá en Chile con Los Decadentes, los trajimos acá.
-Me comentaste que este disco lo escribiste en pandemia, ¿sientes que de alguna manera influyó eso?
-Fue un momento propicio para hacer canciones, no estaba la presión, porque nadie sabía lo que iba a pasar, entonces no había una presión inmediata. Todo lo que iba a pasar se avisaba con tiempo. Para mí fue bacán, no se podían hacer muchas cosas, no podías ir al gimnasio, no podías ir a jugar a la pelota. Entonces, ¿qué podía hacer yo, aparte de jugar playstation? Hacer canciones. Así fue fluyendo. Aparte hubieron experiencias personales, cosa que había hecho antes en otros discos, como hablar un poco más desde mí. Obviamente eso es un cuando uno la compone, después cuando la graba y pasa a ser como del aire, ya no siento que es mi historia. Me puede identificar un poco, pero ya no la siento tan personal. En el momento en que la escribo sí, pero en el momento en que uno le pone play, la canción ya es del viento. Me gustó la pandemia para la parte creativa, la parte económica y social, no.
-En el verano se presentaron en el Festival del Huaso de Olmué, ¿qué tal estuvo esa experiencia?
-Es un sueño hecho realidad. Fue maravilloso. Pero cuando nos invitaron, fue como ‘¿en serio?’, como que nos costó creer. Porque los atributos los teníamos, tanto tiempo, giras de Teletón, viajar a Argentina a tocar, a Perú, a México, ganamos unos discos de oro por dos discos, entonces, habían méritos. Cuando nos invitaron fue como ‘sí’, pero a la vez no creíamos porque decíamos ‘¿por qué nosotros?’. Nosotros tratamos de parecer y ser humildes, pero cuando uno dice ‘somos humildes’, no estás siendo humilde. Entonces, no queríamos creerlo, pero a la vez sí. Cuando ya estábamos encima, le pusimos mucho color, hicimos una preproducción muy cuática, ensayamos en el teatro municipal de Lo Prado. Nos mandamos hacer ropa especial, conseguimos algunos auspicios. Nos jugamos harto. Audiomusica nos ayudó. Le pusimos mucho amor.
“Y en el momento de tocar, estaba preocupado porque no estaba nervioso. Yo creo que fue por la misma preparación, estaba muy confiado. Claro, entre la prueba de sonido y el show se me hizo eterno, eso tiene que ver en parte de nervios y la ansiedad. Pero no sentí nerviosismo. Salió bien. Hacer este ‘multiverso’ con Tommy Rey, fue Amaya Forch y los amigos de El Bloque 8. Quisimos de alguna forma celebrar nuestros 20 años de carrera y también relevar a las figuras que admiramos. Rendir tributo a los héroes populares que tenemos en Chile, que a veces somos bien mezquinos para eso, tiene que morirse alguien para que nos acordemos de él y les demos diplomas y nombres de calles. Siempre pasa eso, pasa con los futbolistas, con los deportistas, sobre todo con los artistas”.
“Voy a desclasificar. También teníamos pensado invitar a Joe Vasconcellos y no pudimos. Todo bien con él, es un amigo nuestro, también ha sido importante para nuestra carrera. Y también a Joe recién ahora le entregaron un premio Presidente de la República, ultra merecido. Y esperamos algún día llegar a tener ese reconocimiento acá en Chile. En México nos quieren harto, acá también nos va súper bien, no me estoy quejando, pero siento que deberíamos tener más participación acá en nuestro país”.
“(A comienzos de los 2000) me acuerdo que el top eran Chancho en Piedra y Joe Vasconcellos. Pero no sé que pasa, es cierto ese dicho que en Chile se quiere más al forastero. Ahora Karol G no sé cuántos Estadios Nacionales va a hacer y acá tenemos súper buenas cantantes (Son tres conciertos). Ni siquiera Los Prisioneros lo pudieron hacer. Ahora Los Bunkers, pero en general no es algo que ocurra. Los Bunkers tuvieron que separarse 10 años y hacer esta cuestión para que ocurra. Entonces, no sé, esto como de mirar en menos, es una cosa curiosa que pasa acá en Chile, pero bueno, vamos a ver, esperemos que las nuevas generaciones, en una de esas, más adelante, algo podrá cambiar.
-Mencionas a las nuevas generaciones, ahora con la música urbana siento que está pasando un poco lo contrario, se está reconociendo acá en Chile…
-Todos estos cabros, que están llevándola, todos los urbanos, han llenado los Movistar. El mismo Young Cister, en Viña le fue súper bien. Hay se mezclan varias cosas, yo diría que es más que musical. Es un tema cultural también. Lo que ellos proyectan es más que música, es como un estilo de vida. Esto es una crítica constructiva, pero en verdad es parte del género. Recuerdo cuando se hacía rap en Estados Unidos, los raperos también salían con joyas y chicas bailando, y el reggaetón también, era súper sexualizado y bien machista. Siento en el urbano chileno también es como lo mismo, algunos arriendan los autos, pero más allá de eso, obviamente es un videoclip, es una puesta en escena. Pero también que se muestra eso, el sinónimo de éxito. He visto a algunos cabros que muestran su billetera que está llena de billetes. No estoy tan seguro si este estilo de música, en 20 años más, va a estar todavía, si nos vamos a recordar de las canciones, porque siento que lo que prima es el estilo de vida, lo que se proyecta, más que la música. Yo escucho de todo, también hay canciones que me gustan de Bad Bunny, de Cris MJ. Pero no podría nombrar cuatro o cinco, ni siquiera de Bad Bunny, no me acuerdo cuál fue la última, como salen a cada rato canciones y la del amigo que canta es muy parecida, siento que no hay una identidad. Claro, las voces se diferencian, pero la música es la misma.
“Siento que hay un tema más cultural que musical. Bueno, la música evidentemente es cultura, pero tiene que haber arte, una concepción de trascendencia del alma, no de la billetera. Lo que trasciende para mí es la obra, no lo que quiero proyectar. Yo escucho Victor Jara y se me estremece el cuerpo, a Los Tres, Los Prisioneros, y no me pasa lo mismo con esto. Siento que esto es entretención, es como comerse una hamburguesa bacán de alguna comida rápida. Es rica la hue… pero no sé si la comería todos los días y espero que mi dieta no se base en eso”.
“Este culto a la ostentación, a mí me carga. Está bien que cada uno quiera hacerlo, mi opinión es que tiene que primar la buena letra o el aporte desde el punto de vista de la creación de algún estilo. Cómo lo hicieron los Chancho en Piedra, cómo lo hicimos nosotros en su momento que nació esto de la ‘nueva cumbia chilena’. Hay una propuesta distinta. Pero aquí no siento que haya una propuesta muy distinta en general. Pero si valoro que sea una corriente, que sea bastante unida y la mayoría de los muchachos se apoyen entre sí, eso me parece la raja. En general en Chile, la competencia siempre ha sido como bien recelosa y siento que en este caso no. Por lo general sí hay una unión. Lo otro que me parece muy bien también es que, como les va bien y generan regalías y reproducciones, también los muchachos pueden tener una calidad de vida bacán y sus familias, eso me parece la raja, muy destacable”.
-Pasando a otro tema, leí que mencionaste que cuando te invitaron sus compañeros a tocar en una fiesta que hicieron en el colegio, sentías que era ‘flaite’ hacer una sonora. Ha pasado eso un poco con la cumbia, que ahora es un género masivo. ¿Cómo ves tú ese cambio y cómo fue cambiando tu propia perspectiva?
-A mí me invitó Miguel Farías y Carlos Azócar, me dijeron ‘hagamos una sonora’, yo dije ‘¿una sonora? ¿qué es esa cuestión?’. La referencia que yo tenía de cumbias, me sonaba la Sonora Palacios por ahí, Tommy Rey por algunas canciones, pero tenía muy presente el sound. La estética a mí no me gustaba, porque era como una mezcla de glam, como de Scorpions o Whitesnake, pero tocando cumbia, era súper raro. Pero una sonora no es esa onda, hace cumbia más clásica, de salón, más mezclado con bolero, hasta toques de salsa. Creo que en ese tiempo era como un placer culpable porque la cumbia la escuchábamos para el Año Nuevo, ‘Un año más’, también ‘Daniela’, ‘El galeón español’, ‘La Peineta’. Era como popular, incluso era como periférico. En ese tiempo se tenía esta concepción de que la cumbia era periférica, de barrio. Entonces era mal vista porque asociada a la baja cultura. Cargaba con todos esos pergaminos que no eran muy bonitos para alguien que no conocía realmente el estilo, porque es muy rico en cuanto a la diversidad de instrumentos, a los arreglos.
“Yo creo que fue básicamente por ignorancia, porque entre Colombia y Venezuela prácticamente (las cumbias) son bailes medios nacionales, acá como es la cueca, pero en las Fiestas Patrias se baila más cumbia que cueca. Para qué decir en las fiestas. Creo que nosotros, como Tomo como Rey, junto a Juana Fe y Chico Trujillo, como que otra manera levantamos un poco ese velo que había, lo hicimos mucho más transversal. Joe Vasconcellos con ‘Las Seis’, como que la gente dijo ‘¿este gallo no era de Congreso?’ Como que se re-válido. De alguna u otra forma, todos los que éramos cumbieros ayudamos con un granito de arena a hacer esto un poco más transversal, desde el sonido, la puesta en escena, nuestro look. Después (nosotros) empezamos a tener mohicanos, puntas, un look más punky porque también nuestras letras empezaron a hablar de cosas. Las empezamos a ocupar como herramienta social, porque cachamos que había caleta de gente viéndonos. Recuerdo que siempre hemos participado de movimientos sociales, nos han llamado y siempre estamos ahí, la gente vacila las canciones. No solamente ‘Arriba de la pelota’ y ‘Borrachos al poder’, sino que esas son cuatro o cinco canciones, pero tenemos 150 en Spotify. Y muchas hablan de cosas más interesantes. Yo creo que en nuestro país ha sido canalizador de movimientos sociales. La vieja ‘nueva cumbia’ como que se convirtió en el cancionero popular de muchas cosas. Partimos tocando en el Galpón Víctor Jara, después para estudiantes, para la FECh, para todas las universidades, estábamos muy arraigados a eso. También al crear canciones más singles, canciones con estética más radial, Juana Fe con ‘Lleve de lo bueno’ y Chico Trujillo con las versiones de los temas antiguos y los suyos, de alguna forma sacaron del ámbito tan clásico de las sonoras más antiguas. Y con un sonido moderno, también hizo que se generara un 2.0 del movimiento de cumbia en Chile.
En el caso nuestro,junto con los Villa Cariño, empezamos también a tocar en otros lados. Empezamos a tocar mucho en el sector oriente, en discoteques. Empezamos a llegar a más lugares de Santiago y de Chile, pero en Santiago particularmente que se notan mucho más las diferentes comunas. Comenzamos a generar una expansión para todos los estratos sociales y eso también significó que más gente empezara a escuchar este estilo de música.
-¿Se viene a futuro para Tomo como Rey?
-Se vienen hartas cosas. Estamos con nuestro disco ‘Baile Infinito’, lo vamos a lanzar próximamente en formato físico, en vinilo y también en CD. Vamos a lanzar un recopilatorio de grandes éxitos en vinilo. Todo esto pronto, en un par meses más. Se viene un documental también que comprende la celebración de nuestros 20 años, que comenzó el 28 de diciembre del 2022 en el Instituto Nacional, donde nacimos, hicimos un show conmemorativo. Después vamos a Argentina a grabar el disco, después a la gira en México que hicimos el año pasado y termina en el Festival de Olmué. Va estar a fines de septiembre, comienzos de octubre. Y por supuesto, girar, tocar, seguir sacando videoclips y sacando música.