La chilota quedó sorprendida tras contestar la quinta llamada de la actividad del “teléfono rojo”, por lejos la mejor llamada de toda la dinámica.
Este martes se vivió una divertida actividad en la casa de Gran Hermano llamada “teléfono rojo”, en la que los participantes ganaron o perdieron algo.
La dinámica consistía en un teléfono que estaba en la casa, el cual recibió seis llamadas durante la jornada. Los jugadores debían contestar y podrían recibir un premio o una penitencia.
El primero en contestar fue Francisco, pero el jugador de 62 años se llevó una mala noticia: en esta nueva placa con comenzará con dos votos en contra.
Luego, fue el turno de Constanza, quien tuvo mucha más suerte que su compañero. Para esta placa, los votos de la bailarina valdrán el doble.
El tercer llamado lo respondió Scarlette Gálvez, quien recibió la instrucción de estar al servicio de la casa por 24 horas junto a otro compañero que ella escogiera. Tras las burlas de Sebastián y Raimundo, la joven escogió a este último para que la acompañara.
Tras esto, Viviana respondió el cuarto llamado, uno de los más interesantes de la jornada. “En la próxima nominación, toda la casa verá a quiénes votas para la placa”, anunció el dueño de casa, pero a la joven no pareció preocuparle mucho.
El quinto llamado
El quinto llamado y, por lejos, el mejor llamado de todos se lo quedó Jennifer, más conocida como Pincoya.
La chilota estuvo jugando con el teléfono durante la tarde y se imaginó una conversación con su esposo, Rodrigo, y su querido hijo. Tras darles algunas instrucciones, mandarles todo su cariño y algunos saludos para sus cercanos en la isla, Pincoya “cortó” la llamada.
Sin embargo, tan solo unos segundos después, el teléfono empezó a sonar de verdad y la jugadora lo respondió, mientras que Sebastián reclamaba que él quería contestar esa llamada.
“Felicitaciones, te has ganado medio millón de pesos”, anunció el dueño de casa, revelando así que Pincoya se quedó con la mejor llamada de toda la actividad.
La chilota quedó descolocada y pronto llegaron sus compañeros para celebrar con ella su cuantioso premio.