“Un misceláneo de tomo y lomo pa’ chasconearse”: Yuyi Filipovic revela los secretos de Vamos que se puede, el nuevo “matinal” de UChile TV

Yuyi, la animadora de Vamos que se puede.
Yuyi, la animadora de Vamos que se puede.

El matinal ficcionado que une a la productora Tres Tercios y UChile TV, después de algún retraso, al fin debuta el próximo jueves, y aquí, su protagonista, Karol Blum en la piel de la animadora Yuyi Filipovic, cuenta todos los detalles.

Prácticamente por tres décadas Yuyi Paola Filipovic Becerra esperó una oportunidad como ésta. Después de alguna aparición puntual en el Festival de Viña y una buena performance en el casting de un reconocido programa de TVN, creyó que pronto llegaría su turno. Pero la espera se alargó más de lo previsto. Cansada de eso, concretamente de no ser la protagonista, resolvió desaparecer de las pantallas y se mantuvo en silencio por varios años. Hasta que ahora, hace unos meses, UChile TV la contactó para cumplir su sueño: brillar con luz propia en su propio programa, un matinal “como la gente”, “como los de antes”, en el que espera continuar (retomar) la senda de Eli de Caso, Margot Kahl y Paulina Nin de Cardona.

En las próximas líneas, ilusionada, le explica al diario pop de qué se tratará Vamos que se puede, su tan anhelado debut como animadora.

—Yuyi, un placer: cuéntanos un poquito sobre ti, ¿cómo te sientes ahora, con esta oportunidad de llegar al fin a la TV y conducir un matinal?

—Oye, gracias por la invitación, amo este diario. Fíjate que yo estuve en la Bomba 4 hace años atrás, años. Mira, ojalá alguien encontrara mi foto pa’ mandártela, pero no sé dónde anda. Mira, es un sueño cumplido volver a la televisión después de tantos años, así que estoy feliz. Feliz, feliz, feliz. ¡Y nerviosa, por supuesto! Imagínate: un matinal, como Dios manda, como los de antes. Lo único que no me gusta es que me dieron un espacio en la noche, en un horario nocturno, pero no importa: mi sueño siempre fue animar y conducir un matinal de calidad, así que da lo mismo, ¿me entendís? O sea, no importa si es tarde, porque más vale tarde que nunca. Eso le digo a mi gente, jaja.

—¿Por qué crees que demoró tanto esta posibilidad?

—Mira, por muchos motivos. Principalmente, porque la televisión nunca me valoró por lo que yo soy: por mi talento, mi desplante y por mis conocimientos de la televisión. Soy una mujer de televisión, y bueno, más vale tarde que nunca, como te dije más arriba. Y bueno, también, pa’ qué estamos con cosas, yo también tengo mis yayitas, la gente me conoce, sabe cómo soy, tuve mis problemitas ahí con el fisco, estuve encerrada en mi casa, sin poder salir, con reclusión nocturna, qué sé yo. Pero bueno, yo abrazo mi pasado. Sin el pasado uno no es nadie en el presente. Soy una mujer muy espiritual y tira pa’ arriba, yo veo el vaso más lleno que vacío y yo todo lo malo lo transformo en algo bueno, ¿me entendís? Entonces, estoy feliz igual. A mí me da lo mismo si me llamaron antes a la televisión o no, yo estoy feliz ahora: cumpliendo mi sueño de animar un matinal. Es lo único que importa.

—¿Es cierto que siempre quisiste llegar a la TV, como se ha dicho?

—Sí, ¿sabes qué? Era mi sueño de niña. O sea, claro, yo incursioné primero en el mundo de la Miss Universo, la Miss Chile, saqué octavo lugar en Miss Chile. Y antes de eso, Miss Talcahuano. Y sí, fíjate que ahí yo descubrí mi pasión por la televisión, y siempre quise escalar a lo más alto. Así que estoy feliz, cumpliendo mi sueño.

karol blum
Yuyi en el matinal ficción.

—Para quienes no te conocen, Yuyi, háblanos un poquito sobre ti. Entiendo, por ejemplo, que alguna vez fuiste notera del Festival de Viña.

—Yo estuve, claro. Efectivamente fui notera del Festival de Viña. Mucha gente se acuerda, o sea, yo entrevisté a los Vengaboys, al Hombre Láser (y a nadie más), lo pasé chancho. No sabía inglés, así que nos comunicábamos a puros gestos...¡me acuerdo y me da risa! Lo pasé chancho, chancho. Y también fíjate que estuve en el Festival de Viña, ¡en el escenario! Y fue una experiencia increíble. Ahí dije: sabís que algún día voy a animar este festival. Yo le entregué la gaviota de plata a Pancho Puelma el año 88, fue una energía increíble del público. ¿El monstruo? Un amor conmigo, lo pasé increíble. Una experiencia que me acuerdo y se me paran los pelos. No: increíble.

También participé en la Teletón, fui corpóreo de Teletín cualquier cantidad de años, esperando que algún día me llamaran pa’ estar sentada ahí, contestando los teléfonos, ¿no es cierto? y aparecer más en televisión. Pero lamentablemente no se pudo, no pude conocer a Mario Kreutzberger en persona, pero no importa, yo sé que ese día va a llegar. Porque los sueños se cumplen, se hacen realidad.

Después de eso, fíjate, de ser corpóreo de Teletín, pasé por un casting ¡atómico, del porte de un buque! pa’ ser animadora oficial de Pase lo que pase y resulta que llegué a la última etapa, me probaron vestuario, todo. Conocí a Felipe, ensayamos, oye, un amor, un encanto: ¡todo lo que dicen de Felipe Camiroaga es cierto! Un encanto de persona conmigo. Y resulta que, de un día pa’ otro, no me llamaron más. Después prendo la televisión y todo lo que yo había hecho, practicado, estaba ahí la Karen Doggenweiler. Así que nada, nada que decir de la Karen, una tremenda profesional, pero siempre he querido con esa yayita: yo debería haber sido la animadora del Pase lo que pase.

—Entiendo que quieres un matinal «como la gente, como Dios manda, como los de antes». ¿A qué te refieres con esto? ¿No te sientes identificada con los matinales actuales?

—¡Claaaro! Vamos que se puede es un matinal como la gente, digo yo. Un matinal como Dios manda, porque eso es: un matinal como los de antes, un misceláneo de tomo y lomo pa’ revolverla, pa’ pasarlo bien, pa’ chasconearse. Y también, obviamente, no por eso vamos a dejar de lado la actualidad. Soy una mujer que ama la contingencia y vamos a tener excelentes invitados para hablar de todos los temas contingentes, el acontecer nacional. Vamos a tener al alcalde Cortés, a excelentes exponentes de la política nacional y también lo vamos a pasar el descueve. Porque actualmente los matinales son puta noticia, tragedia tras tragedia, y eso a mí no me gusta. Señora que está en su casa: ¡lo va a pasar chancho viendo el Vamos que se puede, pura energía positiva!

—¿Quién sería tu entrevista soñada y por qué?

—Ay mira, mi entrevista soñada es a Mario Kreutzberger. Ay sí, esa sería mi entrevista soñada. Pero una entrevista como íntima, ¿me entendís? Como el programa del Martín Cárcamo, De tú a tú, así, íntima, en el living de mi casa, una cosa así. Y también me gustaría, no sé, como ese programa, pero también me gustaría animar como el de Panchito Saavedra, ¿me entendís? Yuyi viaja por Chile... También me gustaría tener un programa más adelante como La jueza, que yo creo que estoy pintada pa’ eso, y no sé, estar en todas de la televisión. Yo creo que ahora me van a empezar a llamar pa’ todo. Animar un reality, ¿me entendís? En todas.

—¿Cómo te defines tú como animadora?

—Mira, yo creo que soy una persona positiva, dicharachera, tira pa’ arriba, buena onda. Mis grandes influyentes en la animación: Eli de Caso, Paulina Nin, Karen Doggenweiler, Margot Kahl, todas las mujeres de la televisión. Un saludo para todas ellas, que son una inspiración para mí.

—Debuta el jueves el matinal, ¿no? Adelántanos alguna cosita.

—Ay ya, a ver, spoiler como dice mi hija, la Maquita: vamos a entrevistar en mi sección Yuyi aprende a Julio César Rodríguez y a la Monserrat Álvarez. Mira nomás. De ese calibre te tenemos.

Vamos que se puede se estrena este jueves 12 de septiembre por UChile TV (11.2, señal abierta).

Guión: Carla Zúñiga.

Dirección: Pablo Arias.

Producción: Tres Tercios, Uchile Tv.

Elenco: Karol Blum, Pablo Boraquevic, Javier Manríquez, Beno Espinosa, Kakoamedia.

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