Mujeres apuntan a diversas conductas sexuales inapropiadas.
Abuso, intimidación y acoso denuncian haber vivido modelos de Victoria's Secret, una de las compañías más grandes y reconocidas de lencería femenina.
138 modelos de la industria, junto a Model Alliance, firmaron una carta que emplaza a L Brands, grupo dueño de Victoria Secret, a tomar medidas sobre el abuso de que presuntamente han sufrido las trabajadoras.
Esto ocurrió, tras la publicación de un reportaje The New York Times, "'Ángeles' en el infierno: la cultura de la misoginia dentro de Victoria's Secret", que denuncia a los altos mandos como culpables e incitadores de los abusos hacia las mujeres que desfilan para Victoria's Secret.
La organización que vela por resguardar la seguridad de la modelos declara: "La cultura de la misoginia, la intimidación y el acoso en Victoria's Secret es aún más atroz y más arraigada de lo que se había entendido anteriormente", haciendo referencia a que hace cinco meses atrás, ya se habían reunido con los representantes para detener esto, pero no recibieron una respuesta positiva.
El llamado es a actuar ya y que se unan al programa RESPECT, que protege que exista un ambiente laboral seguro para los trabajadores del modelaje.
El abuso de poder
Uno de los apuntados por el reportaje, es Ed Razek, ex presidente y director de marketing de L Brands, según testimonios de 30 ejecutivos, empleados, contratistas, modelos actuales y antiguas.
Las fuentes de The New York Times, indican que intentaba desde darle besos a las modelos, les pedía que se sentaran en su regazo y hasta le tocó el entrepierna a la reconocida modelo Bella Hadid.
También indican que las personas que se quejaron de estos actos, tuvieron consecuencias negativas para sus trabajos.
"Lo que fue más alarmante para mí, como alguien que siempre fue criada como una mujer independiente, fue lo arraigado que era este comportamiento", dijo Casey Crowe Taylor, ex empleada de Victoria's Secret.
Además, el fundador Leslie Wexner, a quien supuestamente le habían advertido del comportamiento de su mano derecha, estaba ligado a depredador sexual Jeffrey Epstein.
El magnate negó las acusaciones y dijo que fueron sacadas de contexto.