Forjados a pulso con las escalinatas del Paseo Ahumada como escenario, el trío humorístico contó en De tú a tú sus inicios a finales de los 80, el sueño de llegar a Viña, sus coqueteos con la enfermedad y la muerte, y el duro presente de sus miembros.
Anoche, en una nueva semana de conversaciones, Martín Cárcamo tuvo de invitados a Los Atletas de la Risa en De tú a tú.
Patricio Mejías alias "Pato", Roberto Saldías alias "Chino" y Juan Carlos Donoso alias "Guatón", contaron quienes eran ellos antes de dedicarse al humor.
Pato partió diciendo que él era camionero, al igual que su padre.
Su destino se torció cuando, un día caminando por la calle Huérfanos, vio a dos hombres cantando con guitarra en la calle.
Se impresionó tanto que se quedó viéndolos y desde entonces quiso estar en ese lugar.
Chino contó que a los 17 años trabajó en el Programa de Ocupación para Jefes de Hogar.
Vivía en la población Neptuno, en una familia sumamente pobre y todos trabajaban en el POJH, donde ganaba 5 mil pesos al mes.
Por su parte, Guatón cuenta que hizo el servicio militar en Arica antes de convertirse en comediante, un pasado que le dejó cicatrices.
"Si me están viendo en el programa mis compañeros, no es mentira todo lo que pasamos nosotros", comenzó diciendo.
"Nos agarraban a palos, nos castigaban, nos llevaban al cementerio en la noche a meternos en las tumbas. A mí me sacaban la chucha todo el rato por ser bueno para el hueveo", relata Juan Carlos.
Sus inicios
Pato recuerda que fue en 1987 cuando dejó a un grupo con el que trabajaba haciendo presentaciones en las míticas escaleras del Banco de Chile, en el centro de Santiago.
Se enteró que Guatón también había dejado de trabajar con otro grupo. Por lo tanto unieron fuerzas y empezaron a trabajar juntos.
Se dieron cuenta que necesitaban a alguien más para que pudiera tocar la guitarra. Llamaron al Chino, quien se unió a los dos días.
Los tres se conocieron por la calle, dentro del mundo de los artistas callejeros. De hecho, el nombre Atletas de la Risa surgió porque en esa época corrían de Carabineros, ya que el espectáculo callejero no está permitido.
Gracias a la gente podían salir sin que los pillaran, aunque otras veces iban detenidos.
Por esos días su éxito fue inmediato, tanto así que a la brevedad los llamaron para ir a Sábado Gigante.
El primer día que trabajaron los tres juntos, en el Paseo Ahumada, ganaron 5 mil pesos en un solo show.
Ese monto se consideraba un día exitoso en su trabajo callejero.
Dichato: una ventana
Almorzando completos con Martín Cárcamo, el trío recuerda sus días en el Paseo Ahumada.
El momento peak de su carrera fue cuando estuvieron en el Festival de Dichato: durante su presentación, doblegaron en rating al Festival de Viña del Mar.
Confiesan que llegaron a un acuerdo monetario que era poco, pero les interesaba más estar en el lugar porque sabían que se les iban a abrir muchas puertas.
Estaban en lo correcto.
Cuentan que recibieron harta ayuda en el guión de su rutina, ya que estaban acostumbrados a contar chistes de alto calibre en la calle, aunque tras bambalinas estaban asustados de que se salieran del libreto.
De hecho, recuerdan que en minutos estuvieron a punto de cortarlos por estar contando chistes al filo de la censura, pero debido al alto rating dejaron que siguieran su show.
Tras el espectáculo de Dichato los llamaron inmediatamente al Festival de Viña.
Ellos no se habían dado cuenta de la repercusión mediática que habían causado con su presentación.
"Fue impresionante", recuerda Pato, "nos llamaron de todos lados y nosotros habíamos hecho lo mismo que hacemos en todas partes".
https://www.youtube.com/watch?v=QI14WlyzZyk
Enfermedad
Su siguiente peldaño al Festival de Viña vino acompañado de un problema no menor, la posible ausencia de Guatón.
Por su tardío diagnóstico de diabetes, tuvieron que amputarle algunos dedos en un pie.
Juan Carlos fue enfático en decirle al doctor que le cortara la pierna si es que era necesario: "Doctor, póngame una prótesis, yo voy a estar en el Festival de Viña".
Fue un drama para todos, porque los otros dos miembros tuvieron que ingeniárselas para poder hacer algunas presentaciones sin el Guatón.
"Nosotros ocultamos esto por un buen tiempo, porque no queríamos que del Festival de Viña nos llamaran y dijeran: 'no cabros, dejémoslo para otro año, esperemos que se recupere…'", dice Pato.
"Nosotros con el Guatón llegamos sí o sí, yo ya tenía planeado comprarle una prótesis, pero este iba a estar ahí".
Viña 2013
Los Atletas de la Risa cuentan a coro que estar en Viña fue un sueño hecho realidad.
Pato, emocionado, cuenta por qué se puso a llorar en plena conferencia de prensa.
"El llegar a Viña era lo máximo y estar viviendo solo ese momento me hacía mal. Yo necesitaba que mi señora estuviera ahí y cuando llegó lloré a mares con ella, ahí, delante de todos".
Fueron con una rutina nueva, distinta a la callejera.
"De todos los humoristas que han estado en el Festival de Viña, siendo nosotros los más groseros a nivel nacional, fuimos los que menos garabatos hemos dicho en Viña", dice Pato.
"Lo digo con mucha honra y mucho orgullo", agrega el humorista.
Los tres cuentan que mandaron a hacer para cada uno un juego de antorchas y gaviotas, y que cada uno tiene el suyo en casa.
https://www.youtube.com/watch?v=E2iUUUOtwyo
El gran dolor de Chino
Roberto Saldías confiesa que en diciembre de 2014, tras bajar del escenario en un show en Valparaíso, le informan que su señora estaba sufriendo un paro cardíaco.
Dice que alcanzaron a llevarla al hospital, pero que fue ahí donde falleció.
"Estas cosas no me gusta recordarlas la verdad porque todavía me hacen muy mal", dice el comediante.
"La verdad es que nunca he ido a entrevistas en televisión porque no he podido hablar de estas cosas, porque son mías y me hacen daño", confiesa Chino.
A pesar de todo, Roberto tuvo que seguir con sus rutinas y explica que fue terrible seguir trabajando viviendo un duelo.
A pesar de la tristeza, en su trabajo tenía que hacer reír y asegura que eso lo ayudó.
Pato añade que fue una situación delicada para el grupo, "pero salimos adelante, digo salimos porque somos una familia".
La crisis
¿Qué pasa con un grupo de artistas callejeros cuando no pueden hacer sus espectáculos precisamente en el Paseo Ahumada?
Pato toma la palabra:
"Para nosotros ha sido terrible, gracias a Dios nos pilló después del estallido social, porque hicimos varios shows para el verano del 2020 y nos pilló con un colchón".
Chino coincide y dice que los ahorros llegaron hasta mediados del año pasado, pero que han podido sacar plata con el retiro de las AFP.
Guatón, en cambio, cuenta que ha trabajado en una funeraria.
Dice que la gente entra llorando y se va riendo porque les cuenta chistes.
Pero, a pesar de transmitir buenas energías, la experiencia ha sido terrible para Juan Carlos Saldías por la cantidad de fallecidos a raíz de la pandemia.
Revive el capítulo completo del De tú a tú
Con Los Atletas de la Risa.
https://www.youtube.com/watch?v=PsX-V6gUU28