“Y uno después se ducha…”: Julián Elfenbein reveló “bochornoso” episodio que enfrentó en su adolescencia

“Y uno después se ducha…”: Julián Elfenbein reveló “bochornoso” episodio que enfrentó en su infancia

Animador sostuvo que compañeros le hacían bullying por un particular detalle.

Durante la noche de este viernes, Chilevisión emitirá un nuevo capítulo de Podemos Hablar, el cual tendrá como gran novedad el regreso de Julián Elfenbein.

Eso sí, en esta oportunidad el rostro del canal no lo hará como conductor, sino como invitado. De hecho, será interrogado y hablará de vida íntima o profesional, donde sacará a la luz varias papitas.

Una de ellas, por ejemplo, tendrá que ver con un particular episodio que debió enfrentar en su adolescencia.

“Cuando tenía 13, mis amigos, todos bien desarrollados… yo no, a mí me costó desarrollarme, pegarme el estirón y tener pelitos, no tenía, de hecho, soy poco peludo. Siempre jugué futbol y uno después se ducha y los camarines a los 13, 14 años, me daba un poco de pudor llegaban todos a la ducha y yo no tenía ningún pelo, en ninguna parte cuando mis amigos ya tenían frondoso po…”, se confesará.

Por lo mismo, y para evitar que los besotes lo subieran al columpio, se le ocurrió una genial idea.

“Siempre de afro y yo aburrido de las humillaciones, porque en esa época había bullying, pensé que podría hacer para que el próximo sábado tuviera pelos. Miro mi afro en el espejo y dije tate, me corté varios crespos”, dijo en medio de la atenta mirada de los presentes en el estudio.

La idea de Julián

Tras cartón, aseguró que el cabello que se quitó de la cabeza lo utilizó para colocárselo en su zona pública.

“Tenia una cuestión de agorex, con una como laminita para unir todos estos pelos, me lo probé acá abajo por supuesto y quedaba super bien poh. Yapo, llegó el sábado y antes de meterme a las duchas, pasé al baño, a las cabinas del WC, sacó mi laminita le pongo agorex y me chanto el implante y llegó a la ducha, todos en el fondo, ¡¡¡aparezco yo y … toma!!! Saqué aplausos… imagínate, de un sábado para otro otra cosa po”, complementó.

Sin embargo, reveló que más allá de darse el gustito en ese minuto, el problema ocurrió tiempo después.

“El tema es que a los seis meses el agorex me quemó la zona, estuve mucho tiempo con esa cuestión hasta que me salieran mis propios pelos… fue terrible”, remató.