El chef reconoció además que no ha recurrido a ninguna aplicación de citas: “Nunca he querido probar con ellas, ni de curioso. Creo en los encuentros de la vida”.
Yann Yvin será parte del nuevo programa “Amor a ciegas” de CHV, el cual se estrenará este martes 25 de marzo después del partido de Chile versus Ecuador.
“Estoy con Cristián Riquelme, él como animador, y yo como anfitrión de las parejas, a quienes recibo en mi restaurante del Monticello (Brasserie) con la ilusión de que se conozcan y haya feeling”, reveló en conversación con LUN.
Según el chef, “manejo ciertos códigos de soltería”, y es que desde 2023 no ha tenido una relación romántica.
En aquel año, el profesional se separó de Valérie Flat -la madre de sus dos hijos- luego de tres décadas de relación. Uno de los mayores problemas del romance fue la distancia, ya que desde 2015 ella vivía en Canadá y él en Chile.
“Yo jamás he abierto Tinder”
“Guardamos una buena relación con Valérie y la familia en general. Nosotros llevábamos casi 10 años de relación alejados de cada uno. Ella viviendo en Canadá y yo acá, entonces para mí esta soltería resultó un poco como una continuación de la relación que llevábamos. Al final, sobre todo, yo hacía mi trabajo y llegaba a la casa para estar solo. Eso ha perdurado. Sigo hoy con la misma trama”, señaló al mencionado medio.
Sobre su vida sentimental, sentenció que: “Tengo mucha vida social en el restaurante (...). Pero no doy mucho espacio más allá, no quiero involucrarme tanto sentimentalmente. Y es peligroso, uno empieza a adecuarse a su soledad. A pesar de las personas alrededor, uno se acomoda a su pequeño espacio propio”.
Aunque Yann aseguró que la soltería no es un tema para él: “No me hago problema con eso. Estoy muy activo, tengo mucho trabajo, y si algo más se da, se dará. No estoy buscando algo en particular”.
Al ser consultado sobre las aplicaciones de citas, fue tajante en responder: “Yo jamás, ni una vez, he abierto ni probado Tinder o cualquier app como esas porque creo más en los encuentros, las cenas entre amigos, la vida social (...) Soy cocinero, necesito tocar, comer, morder, jajajá. Nunca he querido probar con ellas, ni de curioso. Creo en los encuentros de la vida, lo que el viento traiga, no me complico más allá”.
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