Ambas competidoras enfrentaban sus platillos en en duelo de eliminación que tuvo a Ennio Carota como juez.
Fue el equipo verde el que logró imponerse en la prueba de inmunidad en el capítulo del jueves en El Discípulo del Chef (CHV), por lo que debió ser el chef Ennio Carota quien impartiera justicia en los duelos eliminatorios entre rojos y azules.
Cuando llegó el momento de enfrentar los platillos ante el italiano, la cantante Princesa Alba presentó su preparación por el lado de los azules, mientras que la modelo Vanesa Borghi hizo lo suyo defendiendo a los colorados.
Una vez que Carota probó los platos de lado y lado, Borghi quiso decirle una cosa al italiano que había tomado el rol de juez.
La preparación de los equipos había sido una sopa Borsch, la cual, en el caso de lo que prepararon la modelo y Miguelito, era más líquida, menos cremosa que la de la cantante.
—Nosotros también habíamos conversado de hacerlo como crema, pero el concepto era sopa —lanzó la integrante del equipo rojo a modo de defensa—, porque los sabores quedan muchos potenciados.
Ante esas palabras, Princesa Alba, aparentemente sorprendida, habría con fuerza los ojos y asomó la mirada para ver que estaba diciendo su rival.
Eso sí, la conductora Emilia Daiber le restó relevancia a la aclaración de Borghi: “Según entiendo, el concepto era hacer Borsch y se puede hacer como crema o como lo hicieron ustedes. Eso depende de la decisión de cada cual”.
Dos posiciones
Luego del incómodo momento, Princesa Alba dio su impresión de la acotación que hizo la modelo:
—Lo encontré... yo no lo haría —dijo ella con molestia—. Uno no tiene que echar para abajo al rival, uno tiene que ganar porque lo suyo es bueno, no es necesario achicar a los demás. Uno tiene que brillar por sí solo.
Luego, Borghi también lanzó su postura:
—No es nada en contra de ella, todo lo contrario, es muy simpática. Pero nosotros tenemos que defender nuestro plato, que es defender al equipo.