El fotógrafo reconoció que la pasó muy mal luego del cierre de su emprendimiento, de modo que debió aprender a no malgastar su dinero.
Uno de los tantos temas que se tocó la noche de este martes, en un nuevo episodio de Tal cual, fue el preocupante escenario que atraviesa el cantante español Miguel Bosé, de quien se supo que tuvo que vender su vivienda, con tal de pagar las millonarias deudas que lo asedian.
Fue entonces que Jordi Castell tomó la palabra para hablar sobre su propio caso, que en determinado momento lo afectó prácticamente de la misma forma.
Todo se debió, de acuerdo al fotógrafo, a un frustrado emprendimiento en el rubro de la alimentación:
“A mí cuando peor me fue, que fue cuando cerré la pastelería. Fue un fracaso, gente cercana me orientó y me dijeron ‘cierra eso’. Ahí entendí el daño de mi propia inexperiencia”, le contó a Raquel Argandoña y José Miguel Viñuela.
Según su relato, desde entonces Castell decidió cortar su relación con las tarjetas de crédito. “No he vuelto a tenerlas. Yo no gasto lo que no tengo. Tengo dos chauchas y vivo con esas dos chauchas. Eliminé todo”.
¿Cómo pudo ordenarse nuevamente con las platas?, le consultaron al fotógrafo, y él rápidamente respondió: “A mí lo que me salvó y lo que salvó mi economía en ese momento de mi vida fue la Cuenta Rut. Aprendí a ser responsable con lo que tengo y con lo poco que tenía en algún minuto”.
Finalmente, Castell admitió que tras el fracaso de su pastelería, “fui pobre…, después de la pastelería yo quedé pobre y tenía que pagar dividendo. No me fui del departamento porque sabía que tenía que salvar la certeza que tenía, que era el departamento”.