Con algunos cambios en las reglas llega este juego basado en el popular deporte de Mundo Mágico, que te llevará desde la Copa en Hogwarts hasta ser campeón del mundo.
El reciente lanzamiento de Hogwarts Legacy cautivó a millones de personas alrededor del mundo, sin embargo el juego no contaba con un elemento fundamental que despierta el interés de todos los fanáticos del universo de Harry Potter, hablamos de el Quidditch, el deporte sobre escobas de Mundo Mágico. A pesar de esto, el popular deporte no fue olvidado por completo por Warner Bros. y ahora a poco más de un año del lanzamiento del juego es que nos llega Harry Potter: Quidditch Champions, un título centrado en la conocida competición y que nos permitirá enfrentarnos con otras casas de Hogwarts, otras escuelas de mundo mágico o incluso participar del mundial contra otros países.
Lo primero que hay que mencionar al hablar de Harry Potter: Quidditch Champions es que no estamos frente a un juego triple A del estilo de Hogwarts Legacy y nos encontramos con un juego de menor presupuesto el cual no cuenta con los mejores gráficos del mundo, ni la mejor historia, pero que si llama la atención por su atractiva jugabilidad.
Si eres fanático de Harry Potter es probable que conozcas las reglas tras el Quidditch, donde si agarras la Snitch obtienes 150 puntos y se acaba el juego, bueno ya puedes comenzar a olvidarte de todas estas reglas y es que si algo hace Quidditch Champions es deshacerse de este tipo de reglas para acercar el juego a lo que sería un deporte real. Es así como en esta ocasión la Snitch dorada nos da sólo 30 puntos, una cantidad de puntos importante pero que no define en ningún caso el juego y por otro lado, no acaba la partida, permitiendo de esta forma capturarla en más de una ocasión De igual forma, los partidos tienen un tiempo límite de seis minutos o acaban cuando uno de los dos equipos alcanza los 100 puntos, por lo que cada uno de los encuentro se siente bastante rápido y dinámico.
Como ya mencionábamos estas reglas aunque en un principio pueden chocar un poco ya que no son fieles a la fuente original, luego de unas partidas se entiende bastante este cambio, sobre todo dada la cantidad de puntos que se anotan por juego, por lo que de mantener esa regla el juego se habría reducido solamente a atrapar la Snitch Dorada sin importar casi el resto del encuentro.
En cuanto al resto de las reglas se mantienen igual en el juego y tenemos elementos bastante atractivos como poder utilizar las diferentes posiciones que tiene un equipo de Quidditch, y es que si vamos a los juegos de Harry Potter de las películas o al clásico Harry Potter: Quidditch World Cup, sólo podíamos utilizar cazadores y al buscador, quedando relegados a un segundo plano el guardián -aquel que defiende los tres aros- y los golpeadores -los que van pegando con bates a las pelotas para golpear a los rivales-. Acá puedes ocupar cualquiera de estos e ir rotando mientras juegas, lo que da mucha libertad al momento de jugar y te permite adaptarte de acuerdo a lo que necesitas en cada momento.
Hay que mencionar eso si, que la jugabilidad sigue estando centrada en los cazadores y el buscador, y tiene sentido, ya que estas son las dos posiciones que anotan puntos, pero al momento de jugar con otras personas, un buen guardián o unos golpeadores que sepan a quien atacar pueden ser la diferencia entre la victoria y la derrota.
Pero refirámonos a la jugabilidad en los partidos y es que en los encuentros podremos movernos en todas las direcciones, robar el balón a los enemigos, esquivar los ataques, acelerar e incluso derrapar al movernos por el estadio, entregándonos una jugabilidad bastante atractiva, la cual logra transmitir de buena forma la sensación que entregan los juegos de deportes. En si Harry Potter: Quidditch Champions es bastante simple en sus bases, pero que tiene su lado difícil de perfeccionar. En este sentido nuestros diferentes jugadores los podremos ir mejorando a medida que vayamos jugando a través de un árbol de habilidades, lo que nos permitirá contar con elementos como mayor velocidad al momento de ir con el balón o hacer más daño a los enemigos al golpearlos. Dado que los puntos de experiencia son compartidos no podremos mejorar todos los jugadores de forma simultánea por lo que tendremos que ir escogiendo que aspectos mejorar dependiendo de nuestras necesidades.
El aspecto más atractivo de este juego y es que lo puedes jugar online y cooperativo de hasta tres persona, por lo que puedes reunir a tu grupo de amigos para unos partidos de Quidditch y es que sin duda este juego se disfruta más de esta forma que jugando en solitario. En este punto hay que ser claro, el juego cuenta con cuatro copas, la primera siendo el tutorial, luego la Copa de Hogwarts, la Copa de los Tres Magos y finalmente el Mundial de Quidditch, por lo que no tenemos mucho contenido single player ni de historia que nos cautive en gran medida, estando todo el foco puesto en los partidos propiamente tal.
En total son cuatro los modos que tenemos en Harry Potter: Quidditch Champions, la campaña con los torneos que ya mencionamos, el multijugador (3 vs. 3), exhibición (en solitario o cooperativo) y práctica (en solitario contra bots). A lo largo del modo Campaña, es que podremos enfrentarnos en diferentes estadios y a diferentes personajes de los libros y películas, como la familia Weasley, Cedric Diggory, Cho Chang, Fleur Delacour, Viktor Krum e incluso Harry Potter. Mientras que en el caso de los modos multijugador jugaremos con nuestros jugadores personalizados y podremos optar por dos posiciones prioritarias con nuestros compañeros tomando el resto.
Finalmente hay que hablar sobre la personalización y es que en el juego podremos personalizar a cada uno de los jugadores de nuestro equipo, ya sea apariencia como elementos cosméticos e incluso modificar la escoba que ocupan, cada una teniendo estadísticas diferentes. Esto nos da una amplia variedad de elementos para jugar y que combinado con la gran cantidad de cosméticos que tiene el juego, nos otorga la posibilidad de que cada uno de nuestros personajes luzcan bastante diferentes unos de otros.
El modelo habitual...
Al jugar Harry Potter: Quidditch Champions lo primero que nos damos cuenta es el modelo que han adoptado para este juego y es que a medida que ganamos subiremos de nivel pudiendo acceder a un pase de temporada, el cual nos dará nuevos elementos cosméticos y de la divisa del juego para acceder a otros elementos como atuendo, escobas, varitas o gestos.
Un elemento a favor es que la monetización -por el momento- es in-game, quedando fuera el dinero real, pero de todas formas, no por esto lo hicieron menos complicado con tres tipos de divisas diferentes ¿Era realmente necesario? Esto sólo nos da para pensar que quizás en un futuro si llegue algún tipo de micro transacción al juego.
En conclusión...
Harry Potter: Quidditch Champions es un divertido juego para pasar el rato con amigos, es un juego que brilla en su modo cooperativo y que cuenta con una jugabilidad bastante dinámica y bien lograda. Eso si, no se siente un juego en el que vayas a pasar horas y horas, sobre todo al momento de jugar solo, ya que el contenido para single player no resulta del todo atractivo.
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