En medio del escándalo, el empresario y cantante salió a enfrentar la polémica.
El legendario cantante coreano PSY, se ha visto envuelto en una polémica luego de que le embargaran su antigua casa en UN Village en Yongsan, Seúl.
La incautación del domicilio se debe a multas impagas por violaciones a las normativas de construcción que nunca fueron corregidas.
En el año 2008, PSY y su esposa compraron un dúplex de lujo de 252.56 metros cuadrados, en el barrio UN Village de Hannam-dong por unos 2.200 millones de KRW (aproximadamente 1,57 millones de dólares). Tiempo después conectaron la residencia a un espacio de oficinas cercano que también adquirieron.
Tras los cambios, surgieron quejas por ampliaciones no autorizadas, incluidas modificaciones de zonas compartidas y construcciones adicionales. A pesar de las órdenes, los cambios no se revirtieron, lo que dio lugar a la imposición de multas.
Las multas impuestas por infringir las normas de construcción no se pagaron hasta octubre de este año, cinco meses después del embargo, aunque las correcciones exigidas en la propiedad siguen sin abordarse.
PSY NO GUARDÓ SILENCIO
Respecto a la polémica, P NATION, agencia de PSY, emitió un comunicado abordando los reportes sobre la incautación de la villa de lujo.
“PSY nunca realizó cambios ni ampliaciones en el edificio. Se enteró de las extensiones ilegales realizadas durante la construcción inicial”, señalaron.
Por otro lado, la agencia aclaró que el pago de la multa se había retrasado, ya que el aviso no llegó en la fecha indicada, sin embargo aseguraron que esta ya había sido pagada por completo.
Según señalaron, el cantante junto con los demás propietarios, se encuentran en proceso de contratar una empresa constructora para rectificar las irregularidades.