El 3 de agosto pasado se promulgó la norma que impide la entrega de más de dos bolsas de plástico en el comercio. El próximo año ya no se podrán dar más de este material.
Una revolución se vivió este año en el país, luego de que se aprobrara la ley que impide la entrega de más de dos bolsas en los establecimientos comerciales de Chile a partir del 3 de agosto. Y desde el 3 de febrero próximo, dicha prohibición será total.
La normativa comenzó hace un tiempo en la comuna de Pucón, donde a través de un decreto municipal se prohibió la entrega de bolsas plásticas. Luego, otras zonas se sumaron a aquella tímida iniciativa: 58 comunas a lo largo del país ya las restringían antes de que se convirtiera en Ley de la República.
"La puesta en marcha gradual de la ley ha generado un impacto positivo tremendo. A partir de su publicación en el Diario Oficial, el pasado 3 de agosto, todos los establecimientos, tanto grandes como pequeños, pueden entregar un máximo de dos bolsas por compra, lo que es un gigantesco cambio respecto a antes de la entrada en vigencia de la ley, donde los comercios entregaban en algunos casos decenas de bolsas plásticas por cliente", según explica la ministra del Medio Ambiente, Carolina Schmidt, a La Cuarta.
Para el ministerio, se necesitan alrededor de 500 años para que se degrade una bolsa de plástico, la que es usada en promedio 12 minutos por las personas. De ellas, sólo el 10% es reciclada por la ciudadanía, convirtiendo el 90% restante en un grave problema mediombiental: se estima que para el 2050 habrá más plástico que peces en el mar.
"La ciudadanía también apoya fuertemente esta ley. La última Encuesta Nacional de Medio Ambiente arrojó el concluyente resultado que el 95% de la población nacional estaba de acuerdo con prohibir la entrega de bolsas plásticas con el objetivo de disminuir la contaminación por plásticos", agregó Schmidt.
Ahora viene la regulación de las bombillas de plástico, las que generan varios problemas medioambientales, ya que debido a su tamaño es difícil su reutilización. "Impulsamos la campaña #ChaoBombillas y llamamos a que prefieran alternativas reutilizables o de papel. Sólo a través de la página web, más de 200 comercios pequeños del país se adhirieron a la campaña, lo que reduce en 7 millones las bombillas utilizadas en un año", dijo la secretaria de Estado.
Chile ha firmado varios acuerdos de producción limpia, como por ejemplo, con el aeropuerto, Naciones Unidas y Fundación Ellen MacArthur. "No existe desarrollo si no es sustentable, las empresas deben buscar la forma de ser amigables con el medio ambiente", agregó.
Una idea ecológica comunal que se volvió nacional
La comuna de Pucón, en la Región de la Araucanía, fue la primera en prohibir, mediante ordenanza municipal, el uso de bolsas plásticas en su territorio.
Luego le siguieron Puerto Varas, Coyhaique, Las Condes, Puerto Natales y otras 58 comunas, hasta que pasaron a convertirla en una Ley de la República.
Actualmente, las campañas ecologistas apuntas sus dardos a las bombillas de plástico, logrando hacer eco en locales como McDonald's y Starbucks.
La defensa de la industria del plástico
La Asociación de Industriales del Plástico (Asipla) defendió hasta último minuto su rubro. Hasta antes de la promulgación de la Ley proponían aumentar los impuestos a quienes usaran bolsas de este tipo.
Además, enfatizaron que 2.500 familias dependían de este negocio. Sin embargo, la norma se aprobó y solo les quedó reinventarse.
Carolina Schmidt: "Siempre protejeremos el planeta"
"Es un gigantesco cambio respecto a antes de la entrada en vigencia de la ley, donde los comercios entregaban decenas de bolsas plásticas por cliente. Como Ministerio del Medio Ambiente tomamos medidas que protejan el planeta. Ejemplo es la implementación de la ley de Responsabilidad Extendida del Productor (REP), que establecerá metas de recolección y reciclaje de ciertos productos prioritarios, donde se encuentran envases y embalajes, la mayoría plásticos".