Una de las tradiciones más esperadas en cada noche del Festival de Viña es el beso entre los animadores. Piquito, calugazo, la expectativa suele ser grandota y en esta oportunidad el ósculo estuvo dominado por el poder femenino.
Y es que Carolita de Morás, enfundada en un sensual vestido rosado que la transformó en una verdadera Barbie humana cumplió con su rol de hembra dominante y agarró al Rafa pa' hacer el ritual tan esperado.
La animadora fue quien tomó la iniciativa, provocando el inmediato aplauso del respetable que llegó a la Quinta Vergara, y aunque en redes sociales la gallá esperaba más de la dupla, lo cierto es que los rostros de CHV cumplieron y dieron el vamos a una nueva edición del "Festival de festivales" como Dios manda.