En el camino a Punta de Lobos y Cahuil se ubican tres domos a orilla de playa, que invitan a encontrarse con el mar.
En 1993 Nicolás Peyreblanque Merino visitaba por primera vez Pichilemu para surfear las olas de Punta de Lobos. Entonces era un estudiante de Ingeniería Eléctrica de la Usach y recién había llegado a Chile tras pasar su infancia en Venezuela.
Con los años, el balneario del surf se convirtió en su destino predilecto y lo visitaba con amistades, familia y luego con sus dos hijas, donde soñaba con un proyecto de vida en la playa.
En 2008, comenzó a plasmar la idea e invirtió en un terreno a pasos del mar y se puso a dibujar los domos que luego se levantarían en la arena junto a una hermosa duna.
Así, viviendo en Santiago, en el verano del 2015 abre sus cabañas familiares Dune & Domes (para 4 y 6 personas) en el camino que une a Pichilemu con Punta de Lobos y de la mano de Melanie Roa fueron testigos del inicio de una aventura, viajando hasta por el día para recibir a turistas.
Pero, hace dos años y tras dejar su trabajo de más de una década, se convirtió en un estilo de vida cuando decidieron vivir en la playita junto a su perra Dalma, su perro Loky, el erizo Rayito, la tortuga Thao y la gata Princesa, a quienes ahora se suma su nuevo perrito Rob.
Actualmente cuentan con tres domos a orilla de playa donde los visitantes pueden encontrarse con el mar, gracias al hermoso sonido de las olas, la brisa marina que encanta, los aromas que entrega el océano y un paisaje donde se unen la arena negra, la flora nativa y las aves del lugar.
Durante la estadía también nos invita a conocer el pueblo de Pichilemu, pasear por Punta de Lobos o recorrer la ruta de la sal que se inicia en Cahuil, por lo que la visita se convierte en una grata experiencia de viaje.
Además, con Melanie abrieron el verano de 2019 Punta de Veggies. Un food truck instalado al ingreso de Dune & Domes y donde ofrecen comida vegetariana.
En su relato, Nicolás comenta que cambió su vida. Desde el agotamiento de la capital se encontró diariamente con el mar, lo que se refleja en un surfeo matutino o al compartir un plato de ulte, cochayuyo o luche que trae desde las rocas costeras. "Maravilloso poder dedicarse a un proyecto de vida que es tu negocio, al lado de la playa y con calidad de vida", nos cuenta, mientras camina junto al canino anfitrión Rob, a recibir a una familia viajera con mascota y que vivirá por unos días la experiencia Dune & Domes.
COORDENADAS
Dune & Domes
Dirección: Camino a Cahuil 3097, Pichilemu.
Web: www.dunedomes.cl