La era de la WWE en el streaming comenzó con la esperada lucha para poner punto final a la guerra del Bloodline entre Roman Reigns y Solo Sikoa.
En el debut de la WWE en Netflix, Roman Reigns se consagró como el indiscutible “Jefe Tribal” tras derrotar a Solo Sikoa en un intenso combate sin reglas.
Pero el momento culminante llegó después del enfrentamiento, cuando The Rock apareció para entregar personalmente el prestigioso Ula Fala, el símbolo de liderazgo samoano, a Reigns.
Consideren que la rivalidad entre el Original Bloodline de Roman Reigns y el New Bloodline de Solo Sikoa había alcanzado su punto cúlmine en el evento Survivor Series: WarGames, donde Reigns aseguró la victoria para su equipo con una lanza sobre su primo Solo.
Y toda la tensión se selló ahora en el primer episodio de RAW en Netflix, donde se programó un combate tribal para decidir al verdadero jefe. Y fue ahí en donde ocurrió una pelea que estuvo cargada de interferencias, recordando el caótico evento principal de WrestleMania 40.
Jacob Fatu y Tama Tonga, aliados de Sikoa, intentaron inclinar la balanza, pero fueron neutralizados por Sami Zayn y Jimmy Uso. En tanto, Kevin Owens atacó a Reigns con un Stunner, aunque Cody Rhodes lo eliminó del escenario. Finalmente, Roman Reigns recuperó el control y derrotó a Solo Sikoa con una lanza para asegurar la victoria.
Cuando Paul Heyman se preparaba para entregar el Ula Fala después de la cuenta de tres, The Rock hizo la aparición sorpresa, tomando el collar y encargándose de colocarlo personalmente alrededor del cuello de Reigns, reconociéndolo con ello como el jefe tribal definitivo.
Fue así que finalmente compartieron un emotivo abrazo en el ring, dejando por ahora en suspenso el esperado y rumoreado combate entre ambos.
De hecho, por ahora no hay una confirmación para la participación de The Rock en el próximo Wrestlemania que se disputará en Las Vegas, por lo que se espera que Roman Reigns tenga una lucha contra otro contricante. Y el nombre que más suena por ahora es CM Punk.