El antiguo dueño de la WWE recibió una sanción de la Comisión de Bolsa y Valores mientras siguen adelante las investigaciones en su contra por las acusaciones de abuso y acoso sexual.
La Comisión de Bolsa y Valores de los Estados Unidos (SEC, por sus siglas en inglés) anunció el viernes que llegó a un acuerdo con Vince McMahon, ex-CEO de WWE, por realizar pagos personales fuera de los controles internos contables de WWE, lo que resultó en declaraciones financieras erróneas en 2018 y 2021.
Según la SEC, McMahon firmó acuerdos para pagar $3 millones y $7.5 millones a extrabajadoras de la WWE a cambio de no revelar relaciones y acusaciones en su contra, omitiendo estos pagos en las finanzas de la WWE.
Las bases del acuerdo entre McMahon y el ente regulador implican, en primer lugar, que McMahon aceptó la decisión de la SEC, sin admitir o negar las acusaciones. Además, pagará una multa civil de $400 mil dólares y reembolsará $1.33 millones a la WWE. Finalmente, se comprometió a no violar nuevamente estas disposiciones.
En la plataforma X, McMahon afirmó que el caso concluyó después de tres años de investigación y calificó la situación como “errores menores de contabilidad” y celebró poder dejar el tema atrás. Pero de las denuncias en su contra no dijo absolutamente nada, pero dejando implícito que ya no hay investigaciones de ningún tipo en su contra.
McMahon dejó su cargo en 2022 en medio de una investigación interna, pero regresó en 2023 como presidente ejecutivo para supervisar la venta de la WWE. Aquello le garantizó un puesto directivo en el grupo TKO, formado tras la fusión con la UFC, pero tuvo que salir en enero de 2024 tras una denuncia de agresión sexual por parte de Janel Grant, una extrabajadora con la que McMahon asegura haber tenido una relación consensuada, negando las acusaciones.
Las acusaciones contra Vince McMahon
En febrero de este año se dio a conocer que las autoridades federales en Nueva York iniciarían una investigación contra Vince McMahon por acusaciones de abuso sexual y tráfico sexual.
Los agentes federales ejecutaron una orden de registro para obtener el teléfono de McMahon y entregaron una citación para documentos relacionados con acusaciones de violación, tráfico sexual, agresión sexual, acoso o discriminación contra empleados actuales o anteriores de WWE.
Entre las acusaciones había:
- Una contratista de WWE que afirmó haber recibido fotos desnudas no solicitadas y haber sido acosada sexualmente.
- Una exluchadora que aseguró que McMahon la coaccionó para practicarle sexo oral.
- Rita Chatterton, exárbitra de WWF, con quien McMahon habría llegado a un acuerdo millonario tras una acusación de agresión sexual.
- Una gerente de spa que alegó que McMahon la agredió en un resort del sur de California.
- Una ex empleada de WWE que afirmó que John Laurinaitis, quien fue jefe de la relación de la empresa con los luchadores, la degradó tras terminar una relación sexual con él.
Pero McMahon ahora plantea que “hoy marca el fin de casi tres años de investigación por diferentes agencias gubernamentales”.
