Controlar la población de la avispa chaqueta amarilla a nivel nacional. Ese es el propósito de la campaña lanzada por el Ministerio de Agricultura.
El ministro de la cartera, Carlos Furche, encabezó la puesta en marcha de esta iniciativa que se realizó en el Parque Metropolitano de Santiago. El objetivo es disminuir los efectos nocivos que este insecto genera en la agricultura.
Esta avispa es un insecto que fue introducido a Chile en los años setenta. Actualmente se encuentra presente entre Atacama y Magallanes, incluyendo el archipiélago de Juan Fernández. Afecta fuertemente a la apicultura, ya que esta plaga ingresa a las colmenas y ataca a las abejas consumiendo las larvas y la miel.
El Instituto de Investigaciones Agropecuarias (INIA) diseñó un plan de control que contempla la instalación de trampas artesanales . Esta trama consiste en un cebo hecho con una botella plástica con dos o tres agujeros en la parte superior. En su interior una mezcla de 100 cc de agua y 100 cc de vinagre de manzana.
Permanente
"Por cada avispa reina que se captura dejan de circular miles de avispas obreras. Son las que nosotros vemos al aire libre. Esto tiene un impacto productivo ya que atacan seriamente los panales de abejas y los campos de fruticultura", explicó el Ministro Furche
Este programa tendrá un carácter permanente, masivo, y será impulsado a través del Instituto de Investigaciones Agropecuarias (INIA). La importancia de poder controlar este insecto entre septiembre y noviembre responde a que en este período de tiempo las avispas reinas salen de su hibernación e inician su actividad para construir sus nidos.
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