En la vida, es fácil encontrarse lenguas de víbora que andan puro envenenando con sus cahuines, pero ninguna tan letal como la que llegó hace poquito a Chile.
Se trata de la Cobra Egipcia. La misma boa asesina que, con una mordida en el cuello, dio muerte a la bella reina Cleopatra allá por el año 30 antes de Cristo.
Aunque eso fue hace cualquier tiempo, la temible serpiente está hospedada en Chile. La boa llegó a vivir al Herpetario del Buin Zoo, junto a otras cinco víboras mortales.
La Cobra Egipcia ha dejado a todos con los chitecos tiritones. Dicen que si la africana se siente amenazada, es capaz de aumentar su capucha.
Y no sólo eso. Esta especie puede hacer crecer su largo hasta casi dos metros. “En condiciones naturales, una sola mordida, es capaz de matar a un ser humano”, advirtieron desde el Buin Zoo.
Las otras amigas peligrosas, con las cuales llegó a Chile la Cobra Egipcia, son la Serpiente Cabeza de Cobre, Serpiente Boca de Algodón, Boa Escupidora, Serpiente Cascabel Albina y la Mamba Verde.
Sin embargo, las cien mil personas que visitan el zoólogico en el verano, pueden estar tranqui. Las serpientes ya fueron operadas en sus glándulas (donde se produce el veneno).
De esta forma, se evita cualquier riesgo, en caso de que las larguiruchas se pongan bravas y quieran lanzar su tóxico al público.
En febrero, el Herpetario, donde viven todos los reptiles del Buin Zoo, estará abierto de lunes a domingo. Los que miden menos de 90 centrímetros entran gratis.
