Como ya hemos visto previamente acá en lacuarta.com, nuestros perritos necesitan de visitas médicas periódicamente, a lo menos, una vez por año. Pero, a veces, la conducta de nuestros peluditos indican que es más que necesaria una visita urgente al veterinario.
Bien sabemos que nuestros peluditos no pueden expresar explícitamente lo que les sucede. Por lo mismo, no queda otra más que seguir bien de cerca el comportamiento de los mismos, para saber si sucede algo malo con el regalón de la casa.
Ante esta situación, acá te dejamos las afecciones más comunes que pueden presentarse en tu perrito y que deben ser seguidas bien de cerca, para evitar cualquier problema mayor con tu querido can.
OJO CON ESTOS SÍNTOMAS EN TU PERRITO
Vómitos y diarrea:
En el caso de que notes que el pequeñin tenga síntomas de problemas estomacales, evitar que ingiera alimentos por unas horas pero sí darle acceso a agua para hidratarse. En el caso de que –además de vómitos o diarrea- se presenten otros síntomas como dolor o temblores, hay que llevarlo sí o sí al veterinario porque puede ser una enfermedad más grave de lo que aparenta.
Trauma:
En el caso de que sufra algún golpe por una caída o una pelea, hay que llevarlo al veterinario para un chequeo más detallados. Ya que podemos estar en presencia de heridas internas como lesiones pulmonares o, inclusive, las heridas externas pueden ser más graves de lo que aparentan.
Problemas respiratorios:
Si su mascota tiene dificultad respiratoria (como respiración débil, sibilancia o asfixia) hay que revisar su boca para ver si hay algún objeto que obstruya el paso. Y, en el caso de encontrarlo, no hay que intentar sacarlo y hay que llevarlo inmediatamente al doctor para que lo haga. Y, si no hay nada que obstruya el paso pero el problema sigue, hay que llevarlo igual.
Problemas neurológicos:
Si el peludito tiene problemas de coordinación, desorientación o no responde de la misma forma a los estímulos, hay que observarlo y llevarlo a un chequeo completo.
Convulsiones:
Si el perrito está sufriendo de temblores, agitación, pérdida de control de esfínteres y/o pérdida del conocimiento, por supuesto que hay que llevarlo al veterinario. Además, si las convulsiones duran más de dos minutos o si sufre de cortas convulsiones por más de un día, podría ser una señal de epilepsia.
Problemas oculares:
El deterioro en la vista es común en los perros mayores. Pero la perdida de vista, la ceguera o el glaucoma pueden afectar a tu mascota a toda edad. Por lo mismo, en el caso de que tu can tenga enrojecimiento de ojos, lagrimeo, inflamación o secreción, se recomienda llevarlo al vet.
Problemas urinarios:
Si su perro no está yendo al baño, puede que sea por una obstrucción urinaria. O, en el caso de que orine con sangre, puede ser una infección urinaria o cálculos urinarios. Por estos síntomas, se recomienda llevar al can sí o sí para una evaluación completa.
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