A los perros no les gusta que los abracen y por su naturaleza cuando los humanos lo hacen, los canes se sienten prisioneros y desean escapar de los brazos que los sujetan.
Así al menos lo aseguró en un artículo publicado por Psychology Today el profesor de la Universidad de Columbia, Stanley Coren,
El experto en comportamiento animal planteó que, a diferencia de lo que la mayoría de la gente piensa, en realidad a los perros no les gusta ser abrazados, y esto tiene su explicación en la naturaleza del coludo.
Estrés
Y Coren ahonda en las razones al precisar que si bien para los humanos un abrazo culturalmente connota afecto, este código no necesariamente rige en el reino animal.
"El contener a un perro puede aumentar su nivel de estrés y, si la ansiedad del perro se hace muy intensa, puede morder", advierte el docente gringo, y detalla que se puede saber si tu abrazo le produce ansiedad a tu perro, si cuando lo haces él cierra los ojos o evita el contacto visual, baja las orejas, bosteza o se relame los labios.
Coren explicó que hizo su descubrimiento tras bajar al azar de internet fotos de humanos abrazando perros, y fue allí que se percató que más del 80 por ciento de las fotografías evidenciaban perros con al menos una señal de estrés o ansiedad.
Para el experto en comportamiento animal la solución es simple: no abraces a tu perro, sino que hazle una caricia o dale unas palmaditas.