Mostrando los colmillos se encuentran los amantes de los cachupines en la ciudad de La Calera,

en la Quinta Región, y todo por culpa de una ordenanza municipal que castiga con una multa de hasta 80 lucas a quienes alimenten o le den agua a los perritos de la calle.

La medida no cayó bien en parte de la población, especialmente en los amantes de los cuadrúpedos que patalearon por la ordenanza que catalogaron de inhumana.

Según indicó Gladys Tobar,

"el alcalde (Eduardo Martínez) ha ido a radios locales y repartiendo  folletos para que no se alimente a los perros de la calle y  si lo hacen se va a cobrar una multa de 80 mil pesos, todo esto, según él, para hacer que baje la sobrepoblación de perros en la comuna"

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En los folletos (en la imagen de arriba) que se han entregado por la ciudad, se recalca el riesgo sanitario y extrasanitario que representarían los cachupines callejeros, y además piden a los vecinos que no le instalen casas en las calles.

A quien le cayó como hueso atragantado la noticia fue a Patricia Cocas, caporal de la organización Proanimal. La animalista consideró como "una estupidez la medida porque nadie puede prohibir dar alimento a un animal".

La chiquilla agregó que "si el alcalde cree que haciendo eso se va a terminar la sobrepoblación está equivocado porque será peor, ya que los perros se van a enfermar y andarán mal humorados, la única opción es la esterilización".

Con inspectores

Clorinda Polanco (63), vive hace 36 años en La Calera y es amante de los animales.

La iñora confirmó que "hace un poco más de un mes el alcalde puso una multa de 80 mil para quienes alimenten a los perros de la calle y para que se cumpla esto al pie de la letra pasan inspectores municipales en moto".

Molesta con la medida, asegura que se fue a plantar a la oficina del alcalde, quien le dijo que "no quería perros porque las casuchas se veían feas en las calles".

La señora Polanco cree que con esta medida "al final lo que van a conseguir es hacer que los perros anden hambrientos y ataquen a la gente, y esa será la excusa para matarlos".

Otra chiquilla que quiso parlar del tema fue Roxana Hernández, vecina de La Calera, quien indicó que "el alcalde impuso esta multa, la idea de él es que no se les hagan casas ni se les dé comida y agua a los animales. Han  tirado panfletos y han ido a varias radios locales a hablar sobre el tema. Yo hablé con él y me dijo que no quería perros en la calle y que el municipio no tenía plata para esterilizarlos para que no siga creciendo la población animal".

Al respecto, en el municipio no fue posible tener la versión de la máxima autoridad comunal, y se precisó que por ahora no se referirían al tema.