Cuando una gata ha tenido crías, naturalmente se asume que las cuidará y alimentará. No obstante, en situaciones de abandono es factible encontrar gatitos de escasas semanas de vida, que requieren de cuidados especiales durante su primera infancia.
Hacerse cargo de un gatito en estas condiciones no es sencillo, y por eso la médico veterinario y docente de la Escuela de Veterinaria de la Universidad de Las Américas, Karen Valenzuela, te entrega los mejores consejos para hecerlo bien.
Si te toca adoptar un gatito de 1, 2 ó 3 semanas, lo idóneo en lo que respecta a alimentación es comprar sustitutos lácteos en el comercio especializado o en clínicas veterinarias, sin embargo, "también puedes ofrecerle leche evaporada, ya que posee los requerimientos nutricionales que requiere y sirve como alternativa".
"El sustituto debe ofrecerse tibio, pero antes de alimentarlos debes dejar caer una gota de leche en tu mano para cerciorarte de que no esté muy caliente. La frecuencia horaria durante la primera semana debe ser cada tres horas", detalla Karen Valenzuela.
Al mes de edad, se le puede comenzar a ofrecer alimento comercial junto con el sustituto, para iniciar el destete.
Cómo alimentarlo
Para alimentarlo "debes posicionarlo con los miembros posteriores hacia abajo y manteniendo su cabeza recta, simulando la posición normal de lactancia con su madre. No debes forzar al alimentar, el gatito se acomodará a la succión por sí solo, luego de esto debes colocarlo en tu pecho y frotar suavemente su espalda para lograr que pueda eructar. Es importante que el animal esté caliente al momento de alimentarlo, nunca en estado hipotérmico", precisa la profesional.
En relación al ambiente, la habitación en donde se encuentre el gatito debe estar temperada y la cama debe ser muy acolchada con mantas tipo polar e idealmente con colchas mullidas y confortables. Además, "debemos recordar que los gatitos de menos de tres semanas no pueden regular su temperatura corporal, por lo que también debes colocarle un guatero de semillas".
Es importante que el animal esté alejado de otras mascotas del hogar. La cama puedes hacerla con una caja de transporte o con una caja de cartón. Lo importante es no cerrar la caja herméticamente para evitar asfixia y que cuente con un espacio adecuado para que pueda desplazarse.
Heces y orina
Para defecar y orinar "es importante que sepas que las madres suelen estimularlos, por lo que ante su ausencia, deberás hacerlo tú con toallas húmedas en la zona genital y en el ano; usa una toallita diferente para cada lugar. Esto debe realizarse después de cada alimentación. Con el mismo tipo de toallas húmedas también puedes lavarlo, aunque luego debes retirar el exceso de humedad con una toalla de papel suave", indica la docente de la Escuela de Veterinaria de la Universidad de Las Américas.
Según explica la médico veterinario, "antes de manipular a los gatitos y sobre todo si tienes contacto con otro tipo de mascotas dentro de tu hogar, siempre debes lavar tus manos, dado que la higiene del biberón, de la cama y del ambiente en general, es fundamental para evitar enfermedades infecciosas en los gatitos".
Por último, Karen Valenzuela recalca que "a pesar de estas recomendaciones, siempre es importante que un médico veterinario vea al animal para que pueda chequear su estado de salud, sugerirte otras medidas a considerar y comenzar con los planes de desparasitación y vacunación que los gatitos requieren".