Desde hace apenas unas décadas que los humanos comenzamos a conocer mejor lo que ocurre al interior de los océanos, aunque en lo concreto el porcentaje que ha sido explorado no alcanza ni al 5 por ciento.
Por ello no resulta extraño que de tanto en tanto se tengan noticias de nuevos animales descubiertos en alguno de los siete mares, y para ponerte al día, al menos en lo que a los más extraños se refiere, preparamos la siguiente galería con la ayuda de los colegas de Sopitas.com.
Tiburón duende
Con ese cuernote puede detectar campos eléctricos que producen otros animales y su mandibula es extensible.
Gusano zombie
También conocidos como boneworms, son capaces de taladrar los huesos de ballenas muertas para comerse la grasa.
Pez dragón
A pesar de que no miden más de 15 centímetros, tienen un órgano que les permite emitir luz para llamar la atención de sus presas.
Lophiiformes
Es el que sale en la película de Nemo, tiene una protuberancia con luz en la cabeza y unos dientes bastante afilados.
Coffinfish
Es una especie de sapo de mar, puede hinchar su cuerpo hasta 22 centímetros y tiene espinas.
Anoplogaster
Tiene uno de los dientes más grandes de esta parte del océano, en proporción a su tamaño.
Tiburón peregrino
A pesar que cuenta con 100 dientes por fila, es inofensivo ya que se alimenta filtrando el agua a través de su enorme hocico.
Chaulidous Sloani
También se le conoce como pez-serpiente, mide solo 20 centímetros de largo pero sus dientes son del doble del tamaño.
Tiburón boquiancho
Solo se han registrado 50 ejemplares, a través de señales eléctricas detectan plancton diminuto.
Isópodo gigante
Estas hermosas criaturas las encuentras comiéndose los restos de animales muertos, por eso llegan a crecer 15 veces su tamaño.
Pez piedra
Además de su camuflaje, tiene 13 espinas venenosas que inyectan una sustancia peligrosa. Cuando más se siente amenazado o se ejerza presión sobre él, mayor la cantidad de veneno que inyecta.
Pez hacha
También conocido como sterniptíqudos, son peces que tienen el cuerpo muy comprimido lateralmente, brillan para atraer a sus presas y tienen unos ojos espantosos, que si te lo encuentras buceando te sacaría más que un susto.
Por monstruos como estos hay quienes no se meten al mar
