Todos le hablamos a nuestra mascota. Es parte de una educación y de un reconocimiento entre especies. Sin embargo, a veces llegamos a pasarnos de la raya. Claro, porque con tal de hacerle sentir a nuestro perro que es el consentido del hogar, nos dirigimos hacia él como si fuera una guagua.
Según la ciencia, hablarle a un cachorro como si fuera guagua funciona. Sin embargo, cuando el perro es adulto lo ignora por completo.
Así lo reveló la investigación publicada en la revista Proceedings of the Royal Society B. Según el trabajo, los humanos buscan atraer la atención del can y hacerlo sentir querido, cómodo y en confianza para mejorar la interacción entre especies.
El estudio contó con la participación de 30 mujeres. Se les pusieron fotos de un cachorro, un perro adulto y un perro viejito. Ellas tenían que decirle al perro frases como "¡Hola, hermoso!" y "¿Quién es un buen chico?", mismas que fueron grabadas.
Hablamos más agudo con los perros
Los investigadores encontraron que los humanos tienden a usar un tono más agudo con los perros. Y el efecto se hacía más significativo al hablarle a cachorros (aumentando la agudez del tono a un 21%).
Según la investigación, tenemos este tipo de comportamientos porque los cachorros son pequeños y los relacionamos con las guaguas humanas.
Esta teoría es conocida como el esquema del bebé, la cual sugiere que respondemos a los rostros de cachorros de manera similar a las guaguas humanas, porque queremos cuidarlas y protegerlas.
Lo cierto es que si se trata de un perro adulto, no te va a pelar por muy bonito que le hables. Así que puedes tratarlo con el mismo cariño de siempre, pero sin hacer esa aguda voz.
Fuente: The Independent