Tucker es un perro chihuahua de Los Ángeles, Estados Unidos, que sufre una enfermedad llamada mucopolisacáridos. Ésta le provoca deformidades y diversos problemas médicos.
El pequeño perrito luce un "poco" diferente a la mayoría de los canes por parecerse a un murciélago albino. Pero igual encanta a los amantes de los coludos con su expresiva sonrisa.
Además de su poco agraciado aspecto, el perro tiene problemas a la vista. Por eso cuando sale de paseo con su dueña debe usar gafas pa' proteger sus azules.
Murciélago en brazos
Como Tucker nació dejadito de la mano del Pulento y por su terrible enfermedad que le impide caminar sobre sus patas delanteras, pasa en los brazos de su cuidadores, como si fuera un bebé.
El pequeño perro-murciélago es el cachorro más feliz de su vecindario y nunca ha dejado que su enfermedad le impida vivir su vida al máximo.
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